Freddy Omar Durán

Muy animada fue la afluencia de comerciantes y compradores este fin de semana en los puntos de la ciudad habilitados para la permanencia de ventas de verduras, carnes y otros productos de la canasta familiar.

Los vendedores reportaron este fin de semana el despertar de una clientela un poco apagada luego de los sucesos electorales; no obstante, como sucede habitualmente, año tras año, agosto ha sido un mes con una mermada actividad comercial, pero que ha sido especialmente afectado en sus primeras semanas por los acontecimientos recientes.

La comparativa de lo que va de agosto manifiesta una tendencia estable en las verduras, con la baja de la papa, que se ha venido ofertando en tres mil pesos por kilo cuando llegó a estar en cinco mil pesos; mientras que el pimentón sigue inaccesible al bolsillo de muchos consumidores, a 5 mil pesos por kilo.

De igual manera la zanahoria y la cebolla blanca han venido cediendo estos días a 3.500 pesos y 4 mil pesos como precio, aunque dependiendo de la calidad y el regateo puede ser menor. Monto similar se mantiene en especies como el tomate.

No obstante la relativa estabilidad en los precios de las verduras, un mercado con solo ese tipo de productos para el tachirense de a pie con un ingreso integral en alrededor de los 130 dólares -con el bono de guerra incluido-, solo un mercado en verduras al mes para cuatro personas -en alrededor de los 50 dólares con 10 productos de mayor consumo- representaría un 40 por ciento.

Por supuesto, el rubro alimentos para una familia tachirense debe incluir las carnes rojas, que en promedio están por el orden de los 24 mil pesos por kilo; mientras que el pollo, esta semana ha marcado una tendencia a la baja situándose en 16 mil pesos por kilo.