En una conferencia dedicada a la concienciación sobre la innovación educativa para personas con neurodivergencias, expertos y activistas destacaron la importancia de la inclusión, la capacitación docente y el acceso equitativo a recursos para la comunidad autista
El evento, organizado por el Movimiento Futuro Azul y la Fundación Mochila de Sueños del Joven Simón, reunió a profesionales, familias y voluntarios con el propósito de fortalecer el apoyo a personas con neurodivergencias.
Sandra Briceño, coordinadora del Movimiento, abrió la jornada con un emotivo mensaje: “Mi mayor deseo es tener 10 minutos para ver el mundo a través de los ojos de un niño autista”.
Durante la conferencia, se abordaron los desafíos que enfrenta la comunidad neurodivergente, como la falta de profesionales accesibles y los altos costos de los tratamientos. Se resaltó la necesidad de adaptar los programas educativos a las realidades de los estudiantes con autismo, garantizando su derecho a una educación de calidad. “No se trata de diferencias en la capacidad de un ser humano, sino de diferencias neurológicas. Y esa es la maravilla del universo: la diversidad”, expresó uno de los ponentes.
Marewin Carnevali, coadyuvante de formación del Movimiento Futuro Azul, destacó el compromiso de la iniciativa: “Hoy estamos creando conciencia, formando e informando. Estamos dándoles a las familias y a los profesionales la oportunidad de crear una red de apoyo”.
Finalmente, hizo un llamado a la unión de esfuerzos, sin importar ideologías, para consolidar un movimiento nacional que garantice atención integral a las personas neurodivergentes y sus familias. (Daleska Vivas/Pasante UBA)