La gobernadora del estado Táchira, Laidy Gómez, informó este lunes que Táchira fue uno de los primeros estados del país que recibió el flujo eléctrico del después del apagón, sin embargo esto no detuvo que el desabastecimiento de combustible en la región se agudizara.

La mandatario regional en un contacto telefónico con Román Lozinski en el circuito Éxitos de Unión Radio, indicó que las colas en las estaciones de servicio de la entidad se extendieron durante la falla eléctrica y se mantienen.

“El problema de combustible se ha acelerado en las últimas dos semanas, pero el tema de la crisis eléctrica agudizo el desabastecimiento (…)  Las bombas se mantenían sin servicio eléctrico situación que generó mucha más cola y no se estaba surtiendo en condiciones normales que tenia el estado”, dijo.

Al problema de vieja data de la gasolina, sumó la falta del servicio de agua potable en comunidades cercanas al vertedero de San Josecito, municipio Torbes, situación que ha genero “un colapso ambiental” en la zona metropolitana de la región.

“Las comunidades se mantienen en protesta y no permiten el acceso de los camiones de recolección de basura lleguen hasta disposición final en el vertedero”, indicó.

Gómez, reiteró que Táchira tiene una condición más critica que el resto de Venezuela. “Sabemos que todos los estados del país sufren crisis de servicios públicos, igual Táchira, pero se suma el hecho de tener la frontera cerrada”.

Sostuvo que el cierre ha obligado a los tachirenses pasar a Colombia por las trochas, pasos ilegales con altos niveles de inseguridad, para poder comprar a alimentos más económicos.

Yuliana Ruiz