Una vez más, a juicio del secretario ejecutivo de la MUD- Táchira, dirigente de AD, Juan Carlos Palencia, “el Gobierno mete sus manos en el aparato productivo del país para desestabilizarlo y beneficiar a las mafias rojas de la corrupción”.
—La reciente medida tomada por Nicolás Maduro y su tren ejecutivo de regularizar la estructura de costos de 50 productos de la Canasta Básica fracasará al igual de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) porque será otra olla de ilícitos-, dijo.
Según Palencia, el Gobierno va a contribuir, a corto plazo, a que estos productos desaparezcan de los anaqueles, bodegas y supermercados, pero a su vez aparezcan “milagrosamente” en los establecimientos de Cúcuta, en el Norte de Santander, Colombia, aún y cuanto la frontera está cerrada y resguardada por efectivos militares y demás cuerpos de seguridad e inteligencia nacional.
—Nuevamente quedará evidenciado que dichos funcionarios -que son los encargados de resguardar la frontera colombo-venezolana- son los principales culpables del contrabando de los alimentos regulados-, repuso.
Dijo que esta jornada de regularización de precios no es otra cosa más que una nueva forma de acorralar a los productores y comerciantes para que alteren sus estructuras de costos a favor del gobierno; así será la única forma de disfrazar su incapacidad de mantener un sistema alimentario estable.
—En poco tiempo se verán los tentáculos de la corrupción y el contrabando rojo, porque serán los mismos funcionarios quienes meterán sus manos para distribuir los productos que supuestamente estarán regulados- sentenció Palencia.
Insistió en que con las mesas de trabajo que realizan los productores, comerciantes y representantes del Ejecutivo nacional, “se ataca a la consecuencia del problema, más no el factor fundamental que es la raíz, mediante la estimulación y protección de la industria de producción de alimentos, la cual fue quebrada por el régimen con el origen del desabastecimiento y el alza de los precios”.
—El Gobierno tiene como meta clara el hambre de los venezolanos y ahora la bancarrota de los pocos productores y comerciantes que quedan en el país-, aseguró.