Un grupo de médicos se apostó este viernes, en horas de la mañana, en la avenida Lucío Oquendo, frente al Hospital Central, para protestar exigiendo respeto a su dignidad laboral.
“Reclamamos por salarios justos, condiciones de trabajo adecuadas entre ellas contar con los medicamentos e insumos necesarios para brindar una atención de calidad a cada uno de los pacientes que ingresan con cierta patología al primer centro de salud del estado y quien hoy tiene que comprar absolutamente todo si quieren recuperarse de su cuadro clínico”, dijo el doctor José Vicente Franco, infectólogo infantil.
“No es posible que después de 60 años se tenga Polio en el país. Eso es inaudito y eso desmerece la calidad académica del profesional de la medicina, cuando hace años nos jactábamos de tener una de las mejores formaciones académicas y ahora somos el hazme reír por los cuatro casos de Polio registrados, por lo tanto es hora de hacer un reclamo para que se respete la dignidad de la profesión médica”, reiteró.
Refirió que tienen 36 niños que reciben tratamiento antirretroviral y no cuentan la debida atención especializada.
Al ser consultado sobre la muerte de pacientes por difteria, confirmó solo un caso. “¿Cómo es posible que después de 27 años sin difteria reaparezcan casos? eso solo de traduce en la aplicación de malas estrategias en vacunación”, dijo.
También alzó su voz de protesta la doctora Lisbeth Mendoza, quien indicó que la intención es salir a la calle protestar, decir que se quiere más a la gente de este gobierno.
“No queremos más esos malos administradores. Cada día la situación en salud es peor” apuntó.
No cree en el canal humanitario, “no lo van aceptar, porque eso es reconocer que no se está cumpliendo del sagrado derecho a la salud”.
Situación caótica
“Aquí ocurren muertes por enfermedades que no se veían, muchos cuadros de hepatitis, hay una epidemia de Salmonella, muchos pacientes con diarrea, porque las aguas no están cloradas, tampoco limpias ni potables”, refirió la profesional de la salud.
“Quisiera que el gobierno sea más sincero. Yo me pudiera ir pero no lo voy hacer, quiero seguir luchando por mi país” apuntó la doctor Lisbeth Mendoza.
Tenemos que reclamar, dijo el doctor José Vicente Franco, por todas las personas que por miedo, cansancio no están protestando, pero hay un grupo de irreverentes que no se quieren ir.
Menos personal
También denunciaron que cada día hay menos enfermeras. “Las que se quedan atienden a un plan de contingencia, pero no es suficiente, incluso en su hogar deja a sus hijos con una taza de arroz y un huevo frito y ella se viene a trabajar sin comer”, denunció, Mayela Valero, enfermera del Central.