El Comité Consultivo de los Trabajadores Administrativos de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador rechaza el anuncio de incremento del ingreso mínimo mensual anunciadas por el Ejecutivo nacional
Norma Pérez
El Comité Consultivo de los Trabajadores Administrativos de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador se pronunció en torno al anuncio del Ejecutivo nacional de incrementar el ingreso mínimo integral a 130 dólares, mientras que el salario mensual no varía.
El profesor Osmey Osmey, de Seaupel, quien forma parte de esta organización, junto a Israel Herrera (Asutraipc), Damarys Merlo, Sitraupel IPB, Luisa González (Sitraimpm-Upel), Ángel Olivero (Utsupelm Siso), Elvis Millán (Aseta IPM), Luis Marín (Sitradupel) y Nubia Pérez (Sutaptajpiprem) dio a conocer que se redactó un comunicado donde fijan posición al respecto:
“Sin aumento salarial y frente al nivel inflacionario que impera en el país, no se normalizará la jornada laboral, ya que no aceptamos que nuestros sueldos sean salarios bonificados. El ingreso mínimo integral pasa de 100 a 130 dólares mensuales indexado; esto corresponde a 90 dólares de bono de guerra económica y 40 dólares de cesta ticket; el salario mínimo mensual sigue en 130 bolívares o 3,5 dólares”.
Explicó que las razones por las que rechazan esta medida, de acuerdo a lo expresado en el comunicado, es que no se cumple con lo estipulado en los artículos 91 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, 23 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y lo establecido en las contrataciones colectivas.
“Sin un salario digno, es imposible que se retomen las actividades laborales administrativas en condiciones normales. Exigimos un salario en dólares, indexado de acuerdo a la inflación, que golpea con fuerza los bolsillos de los trabajadores universitarios. Ante esta precariedad, le recordamos al Ejecutivo nacional que bono no es salario”.
Ratificaron el compromiso a sus agremiados de proseguir incansables en la lucha por la justicia salarial, la recuperación de las reivindicaciones laborales y la calidad de vida que todos merecen, ya que el sector universitario es un pilar fundamental en el desarrollo del país.