Aun cuando la empresa Comiman no ha recibido una respuesta a su solicitud de incrementar el costo de la bandeja del almuerzo y la cena, aseguró que no va a interrumpir el servicio de comedor en la Universidad de los Andes (ULA) Táchira y dará un compás de espera a las autoridades, a sabiendas que todos son conscientes que el costo de la bandeja está desfasado de la realidad.
Jesús Canal, propietario de la empresa Comiman, que presta el servicio de cafetín y comedor en la referida casa de estudios, comentó este miércoles que si bien es cierto que la operatividad se les ha puesto cuesta arriba debido a la inflación, también sería muy irresponsable de su parte paralizar el servicio; ya que los estudiantes no tienen la culpa de la situación.
—No he recibido respuesta, pero nuestra empresa no acostumbra a suspender el servicio, menos de la noche a la mañana. Estamos en la disposición de seguir trabajando. No vamos a dejar sin alimentos a los muchachos, no puedo quitarles la comida porque sé que eso motiva a muchos a venir a la universidad a continuar estudiando—dijo Canal.
Con 16 años de servicio en la universidad, la empresa Comiman espera que en el transcurso de la semana se pueda solventar el problema atendiendo su petición de aumentar el pago de la bandeja, que actualmente está en Bs. 1.800.
— Un jugo cuesta 2.500 bolívares, por tanto una bandeja que viene con jugo, sopa y seco a 1.800 es un precio que no se corresponde con la realidad. Hay rumores de pasillo que sí van a aprobar el aumento, según el estudio de costos mínimo debería ser de 6.000 bolívares, pero para trabajar como es debido debería estar por el orden de los 8.000 bolívares—.
Omar Pérez Díaz, coordinador Académico de la ULA Táchira, agregó que las autoridades universitarias están haciendo contactos con diversos sectores en aras de evitar la suspensión del servicio, que beneficia a diario a más de 3.800 estudiantes.