El calor del abrazo con los mejores deseos para el nuevo año no se había aún desvanecido del cuerpo de muchos conductores, que debieron comenzarlo en colas para abastecer su combustible, colas que preocupantemente se extendían en muchas estaciones de servicio, a pesar de que algunas no abrieron el día jueves.

Un mal de nunca acabar, y que ya ha caracterizado esta reciente Navidad, donde muchos apenas si han aprovechado el asueto para abastecer sus vehículos, cuando pudieron aprovechar esos poquitos días de descanso que se ganan en el año al lado de sus seres queridos o, al menos, relajando su mente en medio de tantos motivos de estrés.

Este primero de enero, algunos decidieron no perder tiempo y aunque es lógico que en estos primeros días de enero no abran ciertas estaciones de servicio, muchos prefirieron guardar el mejor lugar, para que en el día por número final de la placa que les correspondía no se llevaran la desagradable sorpresa de que la gasolina por llegar no alcanzaría para ellos.

Pero, sea cual sea el tiempo en que se estuviese esperando, las gandolas no habían llegado este jueves, para desconsuelo de muchos, en medio de un ambiente citadino paralizado. Muchos de los conductores usan su vehículo como herramienta para su sustento, lo que les trae doble preocupación porque, por un lado, se dificulta su movilización y, por el otro, su trabajo.

Rolando Guerrero, quien trabaja como taxista y reside en El Junco, con los 30 litros de gasolina, apenas si lograba unos tres días de carreras, y luego llegar a su casa. Esperaba que, siendo hoy su día de despacho, pudiese “coronar”, porque de lo contrario debería guardar su carro -con lo que eso implica para el pan de su casa-, hasta la otra semana, ya que las posibilidades de hacerlo el domingo, para él son remotas. Otra opción sería la de darle el gusto al mercado negro, pero con las colas en auge nuevamente, lo más posible es que la pimpina en pesos colombianos se “vaya a las nubes”.

Por su parte, Ever Molina tenía un problema similar, pero en este caso afectaba a un productor agropecuario. Con lo poco con que pudiera aprovisionar su vehículo, apenas si despachaba algunos mercados… eso si lograba hacerlo, porque de lo contrario tendría que suspender su faena. Se encontraba en corrillos con otros con quienes compartía penurias y anécdotas de otras épocas, en las que por estas penurias no se pasaba.

Se preguntaba si era que las gandolas se estaban desviando a otros lugares, porque ni una seña de las mismas se daba en pleno 2020. De otra parte, cuestionaba los últimos planes para afrontar la dura situación de las colas, pues hasta los momentos muy poco han servido.

Desde este lunes 30 se ha reportado la disminución en el número de gandolas que han llegado a la región, lo que propició otra vez las largas colas. No obstante, representantes de la Mesa de Combustible en la entidad aseguraron que la situación con la gasolina se debe a que los administradores de las estaciones de servicio no laboraron martes y miércoles, por ser días festivos.

El alcalde de San Cristóbal denunció que en la ciudad solo estaban operando 4 estaciones de servicio.

Freddy Omar Durán