Monseñor Alberto Ortega Martín ofició misa en la Basílica de Táriba y tuvo un encuentro con estudiantes de la UCAB y de la Pastoral Universitaria. Insistió en que “se puede hacer mucho bien estudiando” y transmitió la cercanía del papa Francisco 

Bleima Márquez

El Nuncio Apostólico, monseñor Alberto Ortega Martín, en su primera visita al estado Táchira preside hoy sábado la celebración de los 102 años de la Diócesis de San Cristóbal.

Desde su arribo, el pasado miércoles, el representante de la Santa Sede en Venezuela ha visitado distintos lugares y presidido eucaristías. Resaltó la importancia de conocer las parroquias y la región, así como la misión de hacer presente la cercanía del papa Francisco. “Es una ocasión preciosa para conocer las parroquias, para conocer la situación de las comunidades, y conocer también esta región preciosa, este estado”, indicó el Nuncio Apostólico.

Reiteró su alegría al “traer el saludo y la cercanía del papa Francisco, quien se encuentra celebrando la asamblea de los obispos en el Sínodo de la Sinodalidad” y destacó sus palabras en Bruselas al reiterar que “por la gracia del bautismo todos tenemos el deber de anunciar a Jesucristo”.

Insistió, en su homilía, en que “todos necesitamos conversión y estar cerca del Señor para llevar adelante la misión de la Iglesia”, y subrayó que eso solo se logra estando unidos al Señor en oración. Recalcó que “sin amor, las obras más importantes de la Iglesia serán estériles”

Ha cumplido actividades en la Basílica de Táriba, las instalaciones de la Universidad Católica del Táchira y encuentro con estudiantes, sacerdotes, laicos y las hermanas Carmelitas Descalzas en Rubio, municipio Junín.

El Nuncio Apostólico también visitó los laboratorios de informática, donde invitó a los jóvenes a reconocer el futuro prometedor que tienen en sus manos. “Es un privilegio prepararse bien en cualquier ámbito”, les dijo, y los animó a enfocarse no solo en maximizar beneficios, sino en el bienestar de la gente.

El representante de la Santa Sede en Venezuela también se reunió con la Pastoral Universitaria ucatense, y resaltó su importancia en el contexto de una universidad católica: “Los animo a ser testimonio entre sus compañeros en la vida; que vean en ustedes la novedad de vida que da Jesús”.

En la tarde, se trasladó a Rubio, municipio Junín, y recorrió las instalaciones del icónico templo de Santa Bárbara. Luego, visitó el monasterio de las hermanas Carmelitas Descalzas “Santa María de La Consolación de la Montaña”, donde celebró la Santa Misa en acción de gracias por sus nueve años de ordenación episcopal.

El viernes 11 de octubre asistió al Seminario para un encuentro con sacerdotes y diáconos, y establecer un diálogo con los formadores. El mismo día tuvo un encuentro con los seminaristas y al finalizar la tarde la eucaristía en las Carmelitas de Paramillo.

Hoy sábado 12, en la mañana, está prevista una Asamblea Diocesana de Pastoral, y en la tarde tendrá lugar un encuentro con los obispos.

Según el cronograma, el domingo 13 de agosto irá a La Grita, capital del municipio Jáuregui. Allá visitará la Basílica del Espíritu Santo, morada del Santo Cristo de La Grita, y la parroquia Nuestra Señora de Los Ángeles.

El lunes, 14 de octubre, será su retorno, pero antes de trasladarse al aeropuerto tiene previsto ir a Diario Católico.