Habitantes del barrio 12 de octubre de Naranjales, La Morita y Los Manguitos, sectores pertenecientes a la parroquia Alberto Adriani del municipio Fernández Feo, denuncian que de nuevo se encuentran sin agua potable, lo que limita las principales labores del hogar.
Según indicaron los afectados, cada vez que reparan la tubería de asbesto que distribuye el agua desde el dique La Zancuda, ubicado en el sector La Reforma, disfrutan por unos pocos días del vital líquido, para, de un momento a otro, abrir las llaves y confirmar que el karma comienza de nuevo.
Una vecina de la tercera edad, precisó que durante este año han pedido colaboraciones para reparar las tuberías en varias oportunidades, sin que se logre mitigar, de una vez y por todas, esta situación.
Por su parte, Luis Delgado, indicó que cuando se supo que se iban a cambiar los tramos más afectados de la tubería que distribuye el agua a estos sectores, muchos pensaban que el tormento terminaría o que, por lo menos, iban a contar más tiempo con agua, pero lamentablemente, esto no fue así.
«La única manera de poner fin a esta problemática es que se cambie completamente el sistema de tuberías, pues los tubos de asbestos ya dieron su vida útil; pero, imagínese, estamos hablando de más de siete kilómetros», comentó Carmen Moreno.
Frente a esta situación, un grupo reducido de familias pagan a camiones cisternas para que les abastezcan de agua, mientras que la mayoría apela a familiares o amigos que tienen “puntillos” quienes les permiten llevar algo de agua a sus hogares; otros esperan la lluvia para aparar algo del vital líquido, por lo menos para hacer la comida.
Vale recordar, que hace unas semanas, 280 metros de tubos fueron trasladados hasta el sitio con el fin de sustituir los tramos más afectados, sin embargo, de acuerdo con información extraoficial, estas labores no se han podido ejecutar, porque no se cuentan con dos juntas, ni con los recursos para el pago a los obreros y el traslado de la maquinaria.
Raúl Márquez