El Día del Adulto Mayor en Venezuela, celebrado el 29 de mayo, fue propicio para una serie de protestas en todo el país, y una de ellas se concentró en horas de la mañana en la planta baja de edificio donde están las oficinas del Seguro Social, en la avenida García de Hevia, o 5ª avenida de San Cristóbal. 

Con pancartas y consignas, un grupo de jubilados del sector docente insistieron lo difícil que en Venezuela resulta llegar a viejo cuando amén de tener cerradas gran parte de las puertas para acceder a un trabajo digno, sufren por lo que ellos consideran una “indigna” pensión que no cubre los gastos de sobrevivencia más mínimos.

Afirmó el presidente de la Asociación de Jubilados y Pensionados del estado, Emiro Díaz: “Rechazamos de manera categórica la política de hambre del Gobierno cuando mantiene la pensión más baja del planeta. No hay ningún país del mundo que pague 3 dólares mensuales, cuando la ONU establece que estar menos de los 3 dólares pertenece al umbral de pobreza extrema”.

Los protestantes rechazaron la Ley de Protección de la Pensión, que la misma representa una evasión de lo establecido por la Constitución Nacional en su artículo 91.

–Los jubilados y pensionados no tienen servicio de salud, no pueden acceder a la alimentación, y por eso estamos en una situación de casi exterminio. Es mentira tras mentira, como cuando anunció un bono de 10 mil bolívares para aquellos jubilados desde enero de 2018 a 2022, que entonces eran 2 mil dólares y hoy no llegan a 300 dólares. A través de las redes sociales todos los jubilados y pensionados deben pedir ayudas para sus necesidades de salud– agregó Díaz.

Para Gladys Chacón, presidenta del Colegio de Licenciados en Educación en el Táchira, plantear que los jubilados con avanzada edad tengan que verse en la necesidad de reincorporarse al campo laboral, resulta una “cachetada” a su condición, y que desconoce los años de aporte en el Seguro Social:

“Yo insto al presidente que se llama obrero a que viva con lo que gana un pensionado en el país, que dio 35 años de su vida al servicio del Estado ¿Y dónde está el humanismo de mucho amor? Pura fanfarria, y la realidad del venezolano más menguada. Muchos andamos como mendigos pidiendo para una rifa y una colaboración. Amanecen muertos muchos jubilados porque no tienen las condiciones para asistir a un centro de salud público, donde tienen que pagar casi todo. Nosotros pagamos nuestras jubilaciones en los años en que estuvimos activos. ¿Para dónde se fueron? ¿Todos estos fondos de pensiones que anuncian a dónde irán?”.