Comunidades del municipio Valera enfrentan a diario la escasez de agua potable y las consecuencias que la ausencia de este vital servicio implica en la calidad de vida y salud de los habitantes.
Por esta razón, vecinos de diferentes sectores alzaron su voz de protesta para dar a conocer la situación que no les permite cumplir con las tareas cotidianas.
Según explicó Carolina Briceño, quien habita en el cerro “La Concepción”, en ese sector deben acarrear el agua en tobos pues nunca llega a las casas por las tubería: “Es un problema que se ha presentado durante todo el año y cada día es peor; cuando llega hacemos fila para recogerla, así sea a altas horas de la noche”.
Agregó que un grupo de la comunidad colocó una motobomba en un área aledaña para tratar de resolver en parte la situación, pero se les dificulta mucho y deben continuar con el pesado trabajo de subir el agua hasta sus hogares por escaleras muy empinadas, a riesgo de su bienestar.
De acuerdo al testimonio de Yusmary Balza, en la comunidad de “La Cabaña”, debieron esperar 24 días para contar con el servicio del preciado líquido y cuando lo restituyeron solo fue por un día. Los vecinos se quejan porque no pueden mantener la higiene necesaria en sus casas para prevenir el Covid-19 ni otras enfermedades que se generan a causa de la insalubridad.
“Aquí estamos pasando trabajo, sobre todo quienes tenemos niños; son demasiados días sin agua. Hacemos un llamado a las autoridades para que conozcan las condiciones en que nos encontramos y tomen las medidas correspondientes”.
Son numerosas las zonas del municipio Valera en el estado Trujillo afectadas por las fallas en el suministro de agua potable, y son muchas las incomodidades que deben padecer los habitantes para conseguirla aunque sea en mínima cantidad. /Norma Pérez.