Corresponde al Gobierno nacional, porque es de su exclusiva competencia, construir el nuevo puente sobre el río Guaruríes, cuyas bases fueron totalmente debilitadas por la crecida de las aguas, hecho generado por las fuertes lluvias caídas sobre esta zona que delimita los estados Mérida y Táchira, precisó el gobernador Ramón Guevara.

Dijo el mandatario que un aproximado de 20.000 millones de bolívares deberá ser destinado para la construcción de esta importante estructura, que enlaza los municipios Alberto Adriani, de Mérida, y Samuel Darío Maldonado, del Táchira. La caída de este puente afecta de manera directa a una población que sobrepasa las doscientas mil personas, ubicadas entre ambos municipios y, desde luego, al transporte de toda suerte de productos y mercancías, especialmente del sector agropecuario.

Recordó Guevara que ni la Gobernación de Mérida ni la del Táchira cuentan en sus presupuestos con sumas parecidas a las que —se estima— deberán ser invertidas en la nueva edificación. Detalló en la gira de inspección que —junto a la gobernadora del Táchira realizó al puente— las bases habían cedido el viernes pasado dado que la estructura se derrumbó por efectos de la crecida del río Guaruríes.

Indicó que su despacho prepara un documentado informe técnico que será elevado ante las autoridades pertinentes del Ejecutivo nacional, realzando la participación de especialistas de la Universidad de Los Andes, de amplio reconocimiento nacional e internacional, junto a los profesionales del Instituto Merideño de Infraestructura y Vialidad, (Inmivi) y de Protección Civil Mérida (PCM).

Reiteró la urgencia de acometer la construcción del nuevo puente mientras, en mancomunidad con el Gobierno central, se llevan a cabo los trabajos necesarios para facilitar el tránsito de gandolas, camiones y autos, así como una trocha alterna para peatones que crucen desde ambos extremos, con la asistencia y seguridad indispensables.

En cuanto al suministro de combustible para el Táchira, Guevara acotó que “para el estado vecino este servicio se encuentra totalmente limitado, puesto que se deben tomar vías alternas, como El Vigía y Santa Bárbara de Zulia, para que las pesadas unidades que transportan gasolina puedan cumplir su tarea”.

(Prensa OCI Mérida)