Al igual que durante los meses de agosto y septiembre, en octubre las lluvias han sido muy escasas en una buena parte del estado Táchira, exceptuando la zona norte donde sí se han presentado precipitaciones más notorias, declaró Luis Vargas, meteorólogo especialista en climatología y pronósticos.
Táchira no ha sido el único estado afectado. “Hay varias entidades donde los registros pluviométricos han estado por debajo de los promedios históricos, tal como lo preveía el pronóstico estacional para el mes de octubre, lo cual, obviamente ha venido acompañado de menor nubosidad, mayor insolación, por ende, mayor calor”.
De allí las altas temperaturas “que estamos sintiendo, donde en la zona metropolitana de San Cristóbal se han registrado valores máximos entre 33 y 35 grados Celsius, superados en la zona norte y de fronteras”.
Refiriéndose a otros estados, recordó las mediciones de los estados llaneros, cuyas temperaturas máximas absolutas han llegado hasta 38 grados Celsius, al igual que en Zulia, Falcón, Lara, Anzoátegui, el norte de Bolívar.
Además, del factor climatológico de escasas lluvias “se debe estar claro que nuestro clima está cambiando año tras año con un calentamiento global del aire superficial, situación que difícilmente tendrá algún retroceso”.
“El 2023 fue el año más caluroso desde que existen los registros modernos y el 2024 se perfila a superarlo”, enfatizó Vargas.
Sin embargo, el período lluvioso continúa en Venezuela, a pesar de haber tenido un octubre deficitario. “Regularmente la temporada de lluvias en este país finaliza en noviembre, por lo cual se prevén que aún quedan probabilidades de precipitaciones”.
De consolidarse el fenómeno de La Niña en las próximas semanas, pudiera tenerse precipitaciones atípicas dentro de los meses correspondientes al período seco, es decir, entre diciembre y abril.
De acuerdo con los pronósticos, de formarse La Niña, “sería de intensidad débil y duraría al menos hasta el primer trimestre del año 2025”. (Nancy Porras)