“Hace un año, más o menos, a través de la mensajería de Yo Reporto a La Nación, advertí que el tramo entre Santa Elena y Rubio estaba por irse. A los pocos días, la Gobernación inició trabajos temporales, paliativos, porque, al no tener recursos, terminaron compactando la vía y colocaron una carpeta de asfalto frío. Hoy puedo decir que el paso está cediendo, no sé si producto de una falla, falta de construcción de un muro o de canalización de las aguas de lluvia. El asunto es que en los próximos días las comunidades de Pata de Gallina, Tononó, y hasta Rubio, quedarán totalmente incomunicadas con San Cristóbal”.
Así se expresó Iván Solarte, usuario de la referida vía, quien advirtió sobre el riesgo para las personas que deben obligatoriamente transitar por la zona y, sobre todo, la alta probabilidad de que los caseríos de Santa Elena, Pata de Gallina, Tononó, e incluso Rubio, capital del municipio Junín, queden incomunicados.
Al respecto, Solarte explicó que la otra ruta de acceso de esas poblaciones, hacia la capital del Táchira, es por El Valle, pero por allí tampoco hay paso.
“Es por eso que hacemos un llamado al Gobierno nacional para que inicie los trabajos necesarios, antes de que la vía termine de irse. Esta solicitud a los entes nacionales obedece a que la Gobernación del estado no tiene recursos suficientes para hacer frente”, señaló y añadió que al otro extremo del paso también hay fallas de borde.
Exigen solución
Un grupo de habitantes de El Mirador, Santa Elena, Cipriano Castro, Lagunillas y La Popa, municipio San Cristóbal, salieron a la calle para exigir a la gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, y al alcalde de San Cristóbal, Gustavo Delgado, la recuperación y mantenimiento de las principales carreteras que comunican al municipio capitalino con Junín y otras poblaciones de la frontera.
Juan Estupiñán, residente del sector La Popa, hizo el llamado a la gobernadora Laidy Gómez, y le exhorta a cumplir sus funciones, porque el mantenimiento y mejoramiento de vías son de su competencia.
Por su parte, Luzyerly Cárdenas, vecina de El Mirador, resaltó la preocupación de los lugareños ante lo que consideran el olvido de los gobernantes regionales y municipales, y recalcó que por Santa Elena solo queda un canal por donde circular. “Por allí transitan gandolas y, con la pésima condición de la vialidad, corren peligro, incluso de volcarse al precipicio, hecho que podría causar daños lamentables”, indicó.
Los afectados exigieron dejar la politiquería y abocarse a las funciones para las que fueron electos. “Esperamos que demuestren su gestión de gobierno, con hechos y no con palabras”, insistieron.
Bleima Márquez