A los muchachos del quinto año de Administración mención Mercadeo de la Universidad Católica del Táchira, uniformados todos con su franela de la Promoción 13, se unieron en oración estudiantes de otras carreras, profesores, personal administrativo, autoridades académicas y hasta el alcalde de San Cristóbal, Gustavo Delgado, en una misa celebrada este lunes en la mañana para pedir a Dios por el pronto regreso, sanos y salvos, de Dexsi Martínez, María Laura Ferrer y Francisco Carrillo, desaparecidos desde el pasado viernes.

La cita, como habían difundido en redes sociales, sería en el aula B-20 del campus de Sabana Larga, en Los Kioscos. Pero, por grande que sea, en ese auditorio no hubiesen entrado todos quienes llenaron las áreas abiertas entre los edificios A y B, frente a una imagen de Jesucristo en el jardín.

Concelebraron los sacerdotes Edgar Magallanes y José Francisco Aranguren en medio de un profundo silencio que mantuvo la comunidad universitaria; organizada, los mayores sentados, los jóvenes de pie, en semicírculo. Lo único que rompía ese silencio eran los sollozos de muchos, hombres y mujeres por igual.

Durante la eucaristía elevaron súplicas por el bienestar de Dexsi, María Laura y Francisco en la oración de los fieles; ofrendaron ante el altar la luz, el santo rosario y las flores, e intercambiaron abrazos de fortaleza en el saludo de la paz.    

“Estamos en oración, todos. Su familia de la universidad, sus compañeros de estudio, estamos esperando por ustedes. Esperamos un pronto regreso. Estamos todos con la fe y la esperanza de que ya van a regresar”, dijo, conmovida, la decana de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, Ana Gabriela Montañez.

“Estamos esperándolos”, coincidió Milena Pernía, compañera de clases de los muchachos. “Tenemos fe de que ustedes van a volver y que van a estar otra vez al lado de nosotros”.

Dexsi Martínez, María Laura Ferrer y Francisco Carrillo se encuentran desaparecidos desde la madrugada del pasado viernes 26, luego de que compartían en un local nocturno de la avenida Ferrero Tamayo. El carro en el que se trasladaban fue localizado en la avenida Carabobo.