Juan José Contreras
La esperanza que emana de la fe puede ser motor de vida, e iluminar de muchas maneras la existencia para alejar la penumbra de los pensamientos negativos. Con 78 años de edad, Benilde del Carmen Colmenares, de Michelena en el estado Táchira, tiene 21 años de ser peregrina del Santo Cristo de La Grita, al cual considera su ángel de la guarda.
Benilde Colmenares lo recuerda: “A mí me iban a operar una rodilla, yo no quise, se me había salido el huesito de un golpe que me di. Hubo un momento en que me llegó a la mente el Santo Cristo de La Grita, y pensé en ir ante él.” Y así fue, tardó 20 horas esa primera peregrinación desde Michelena a La Grita, y aún con el dolor de su rodilla, llegó para el día del Santo Patrono.
“Yo le dije que iba a seguir yendo las veces que pudiera, y solo he faltado el año pasado y este por la pandemia. Hace 21 años no tuve que mandarme a operar, mi rodilla sanó, y aquí estoy, bien” dijo Benilde Colmenares.
Paso a paso
Desde el municipio Michelena, vía el páramo de El Zumbador, por años Benilde Colmenares ha ido hasta el municipio Jáuregui, ida y vuelta, para ver al Santo Cristo. “La edad no ha sido limitante para mí. Al principio iba con jóvenes del pueblo, después con una comadre, las dos solitas nos íbamos, piano piano. A veces nos quedábamos en El Refugio, y otras veces en El Santuario. Lindo, bello todo eso, mucha gente, bendito Dios” describió la devota michelenense que espera pase la pandemia para retomar el recorrido el próximo año.
“Recuerdo que en varias oportunidades me hicieron entrevistas en la carretera, me paraban y hablaban conmigo, la gente se admiraba en verme, a mi edad, caminando a ver a la Sagrada Talla. Yo siempre firme en mi propósito.”
La madre de seis hijos, dos hembras y cuatro varones, y abuela de cuatro nietos es una asidua caminante, no solo de la peregrinación al Santo Cristo de La Grita, sino que también a lo largo de su vida ha participado en competencias, “En Michelena, en Rubio, San Cristóbal, La Curva…, tengo ocho medallas, tres trofeos, y algunas placas. Gracias a mi profesor Omar Tapias. Siempre le digo a la gente que camine, por su salud, el deporte es muy bonito. Me dicen la atleta número uno de Michelena” comentó Benilde Colmenares.
Devoción
Visiblemente emocionada y con lágrimas en sus ojos ante la pregunta ¿Para usted qué representa el Santo Cristo de La Grita?, respondió: “Es mi ángel de la guarda, ¿qué no le pido yo a él que no me conceda? A pesar de mi enfermedad de los huesos, porque yo tengo el 90% de descalcificación, él me tiene aquí, paradita. Los médicos en el hospital me decían que yo ya estaba para silla de ruedas, y míreme, me siento bien.”
Para esta abuela michelenense la imagen del Ícono del Rostro Sereno la inspira y motiva, “Para mí es lo mejor, después de Dios y la Santísima Virgen, el Santo Cristo de La Grita. Él me ha ayudado a sobrellevar esto, la pandemia, y siempre le pido por mi familia, mis hijos, nietos y mis amigos.
Benilde del Carmen Colmenares es un ejemplo de devoción y de ímpetu, de no cruzarse de brazos, de salir a conquistar la meta, que en su caso es cada año ir caminando desde Michelena hasta La Grita para ver a su adorado Patrono. La edad es solo un número, el poder está en la mente, y la juventud en el corazón. Que el Santo Cristo la bendiga, y a todos los que leyeron estas líneas. Amén.