Reportajes y Especiales
Vivir las Misas de Aguinaldo con ritmo venezolano
martes 23 diciembre, 2025
El Táchira vive intensamente sus Misas de Aguinaldo. Esta tradición, en pleno desarrollo, es el camino espiritual hacia la Natividad del Señor. Nuestro país es el único con el privilegio de celebrar estas eucaristías con cantos venezolanos.
Bleima Márquez
El estado Táchira se encuentra inmerso en una de sus tradiciones más queridas: las Misas de Aguinaldo. El novenario de nueve eucaristías, que comenzó el pasado 16 de diciembre, avanza como una cuenta regresiva de profunda fe. Culminan en Nochebuena y representa el camino espiritual de los católicos andinos hacia la Natividad del Señor.
Jorman Carrillo, párroco de la iglesia Santuario Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en el barrio San Carlos, de San Cristóbal, explicó la esencia de esta tradición que se festejan entre el 16 y 24 de diciembre.
El padre Carrillo narró que esta celebración católica es una preparación para conmemorar el nacimiento del Niño Jesús. “Corresponden a las ferias previas a la solemnidad de la naturaleza del Señor. Meditamos con mayor profundidad en las profecías y los textos litúrgicos que refieren a la venida del Mesías”.
Subrayó el sacerdote que este tiempo no es solo un acto cultural. Revive el acontecimiento más grande en la historia de la salvación cuando “Dios se hizo hombre y sigue caminando con su pueblo”, enfatizó el guía espiritual.

Venezuela, con villancicos en la misa
El sacerdote destacó un hecho único para los venezolanos. Solo en el país, por un privilegio especial otorgado por el papa León XIII, quien se mantuvo durante 25 años en su pontificado, entre 1878 y 1903, se tiene el gozo de celebrar las Misas de Aguinaldo con cantos venezolanos.
Este obsequio de la Santa Sede de la Iglesia permite a Venezuela dejar de lado los cantos litúrgicos tradicionales. Así se incluyen los villancicos y parrandas nacionales, propios de nuestra tierra, como: Burrito Sabanero, Niño Lindo, Corre Caballito, El Niño Criollo, Tutaina, Fuego al Cañón, La Capilla está Abierta, Cantemos Alegres, entre otros temas.
De acuerdo con lo expuesto por el padre Jorman Carrillo, Venezuela es el único país que disfruta de este regalo. “La tradición es una Navidad anticipada que los sancristobalenses viven con fervor cada mañana”, señaló. En la parroquia San Carlos, la eucaristía de la misa de aguinaldo comenzaron puntualmente a las 06:00 de la mañana.
Posadas Navideñas
Previo al inicio de las Misas de Aguinaldo, la comunidad efectuó otra tradición arraigada a esta época. Las Posadas Navideñas. Según relató el padre Carrillo, iniciaron el 1 de diciembre y finalizaron el 11 de este mismo mes. Con esa actividad, dieron paso a la Novena de Navidad.
Detalló el padre que esta tradición, de origen latinoamericano, recrea el camino de San José y la Virgen María buscando albergue. Subrayó que la representación, que lleva más de treinta años en la parroquia, cobra más fuerza cada año.
Explicó que se organiza de forma didáctica. Los feligreses recrean la negación de posada a la Sagrada Familia en casi todos los hogares visitados. Solo en la última vivienda se acepta dar albergue. Allí se reúnen para compartir una merienda navideña. El equipo de prensa de Diario La Nación acompañó este recorrido el último día de la posada navideña.

Bendición de los pesebres
Durante el recorrido de las Posadas, el padre Jorman, junto a otro sacerdote de la parroquia, compartió cercanamente con la comunidad. Ambos guías espirituales entraban a los hogares de las familias del sector para la bendición de los pesebres.
En el recorrido era notable la participación infantil. Los niños se visten de pastores, llevando consigo ovejas elaboradas por los propios vecinos. También representan a la Virgen María, San José y otros personajes de la época. Esto constituye un hermoso pesebre viviente transeúnte.
“Es un hermoso gesto religioso, devocional y cultural. Los vecinos comparten la ruta. Es un pretexto precioso para que todos salgamos de nuestras rutinas, nos unamos como la gran familia y preparemos el corazón para celebrar juntos la Navidad”, dijo el párroco.
Fe profunda y esperanza viva
La representación de la Natividad continúa durante las Misas de Aguinaldo. La feligresía también presenta el pesebre viviente dentro del templo, actividad que complementa la formación espiritual. “Es el mejor modo de dar catequesis a los niños”, afirmó el párroco.
Destacó la fe profunda del pueblo tachirense. “Solo necesita un poquito de motivación en la fe y ya el pueblo de Dios responde maravillosamente bien”, indicó.
— ¿Qué hace diferente al Táchira con otras regiones del país?
— Es la fe de su gente. La fe es profunda y madura, celebrando la vida con confianza en el Señor a pesar de las adversidades.
— ¿Cómo es la feligresía tachirense?
— Los sancristobalenses son un pueblo maravilloso. Lo defino con una fe profunda y un amor tierno a Jesús que lleva a flor de piel. Es un pueblo alegre, sencillo, humilde, cercano y cordial. Con un pueblo así no es difícil ser pastor.
Resaltó que las Posadas Navideñas, además de recordar la peregrinación, ayudan a meditar el misterio de la Encarnación. “Dios es solidario con toda la humanidad”, recordó el sacerdote.
La Encarnación: un misterio de solidaridad divina
El padre Jorman explicó que el Adviento es la preparación para un misterio profundo. Afirmó que la celebración de la Navidad y las Posadas ayuda a meditar en la Encarnación del hijo de Dios. La fe va más allá del recuerdo del pesebre; es un ejercicio de reflexión y solidaridad.
Destacó que el pesebre recuerda la vulnerabilidad del Niño que nace. Al mismo tiempo, el gesto de Dios es solidario con toda la humanidad. “Fue la propia solidaridad de Dios lo que motivó la encarnación de su Hijo”, manifestó el sacerdote.
Estas celebraciones devocionales no son solo actos culturales. Complementan la formación espiritual y teológica de los feligreses. Permiten que el amor de Dios se anide en la mente y el corazón, reviviendo anualmente el amor tierno que Jesús trajo al mundo.
Como representante de la Iglesia, el Padre Carrillo invita a mantener la fe y la esperanza viva en estos días de Adviento. “Mantengamos viva la fe. No escatimemos esfuerzos por acompañar a nuestro pueblo en la esperanza”.






