José Félix Oletta indicó que la segunda ola nunca pasó y que se espera una tercera ola mucho más fuerte. La flexibilización continua, que incluye retorno a clases presenciales y próximas elecciones, traería severas consecuencias
El exministro de Salud, José Félix Oletta, advirtió que Venezuela atraviesa la fase más intensa de la pandemia por COVID-19.
«Al analizar el total de casos producidos en Venezuela desde marzo de 2020, ya hemos alcanzado 70% de esos casos en el año 2021 entre enero y septiembre. Es una cifra que es el doble o más del doble de la que tuvimos en todo el año 2020, eso te señala la dinámica de una pandemia mucho más intensa en 2021 que en 2020″, declaró en entrevista concedida a Punto de Corte.
Hasta el 28 de septiembre, el total de casos informados oficialmente desde el comienzo de la pandemia era de 364.758. De ese número, 31,28% (es decir, 114.083 casos) corresponden al año 2020. Mientras que 250.675 contagios pertenecen al 2021.
Esto quiere decir que la cifra de casos acumulados en 2021 es de 2,19 veces mayor que la informada en 2020.
El médico venezolano advirtió que, al observar el comportamiento de la curva de casos, todo apunta a que la segunda ola nunca pasó, sino que llegamos a una «suerte de meseta que está aplanada desde mayo en adelante».
Llamó la atención sobre el hecho de que, en las últimas semanas, tanto Distrito Capital como en Miranda están presentando las cifras más elevadas desde el comienzo de la pandemia en lo que respecta a los casos diarios.
«Tenemos el comportamiento epidémico más importante desde el mes de marzo de 2020″, remarcó.
Indicó que los últimos días han sido récord en consultas de grupos familiares afectados: «No hay una familia que no tenga un conocido o un familiar enfermo. Ese es un reflejo muy elemental de la diseminación de la enfermedad con un patrón doméstico, comunal, de transmisión».
Asimismo, precisó que la transmisión está más intensa en unas áreas que otras: «El centro-norte-costero del país sufre una onda epidémica de altísima transmisión. Estamos recibiendo muchísimas consultas de personas con síntomas similares a una gripe, o con fiebre, los estudiamos y en 80% o 90% de los casos están positivos», agregó.
Flexibilización imprudente
El experto y miembro de la red Defendamos la Epidemiología considera que la vacunación en el país es «ineficiente y lenta», puesto que solo 14% o 15% de la población meta ha recibido vacunación completa.
«Y eso es muy poco, sobre todo cuando se abre la expectativa de flexibilización, cuando se abren escuelas a todo nivel y hay un proceso electoral, eso sería una imprudencia si no planificamos adecuadamente», dijo.
Recordó también que aunque la vacuna es la herramienta más valiosa y efectiva, debe ser igualmente combinada con estrategias de aislamiento de los contagiados o de las personas más vulnerables, utilización de medidas de barrera como los tapaboca y evitar reuniones en espacio cerrados.
«Todas estas cosas van a funcionar como elementos para reducir el número de casos y que el impacto para la sociedad como en fallecidos y enfermas. Los países con niveles eficientes de vacunas han podido reducir el comportamiento de las ondas endémicas y han comenzado a disminuir las restricciones a actividades académicas y deportivas», refirió.
Sobre la posibilidad de que se vaya a una flexibilización continua desde el mes de noviembre, Oletta recordó que es una medida que podría traer severas implicaciones.
Añadió el experto que, incluso si se mantiene la intención de ir a esa flexibilización, las presiones al sistema sanitario harán levantar la medida.
«Lamentablemente, tendremos una demanda de servicios mucho mayor y exigencias mucho mayores, probablemente, no se va a poder mantener una flexibilización continua en la gran mayoría del territorio nacional por la diseminación del virus», concluyó.