Humberto Contreras
El 8 de mayo se celebra el Día Mundial del Cáncer de Ovario, una fecha establecida por organizaciones de pacientes con el propósito de concienciar sobre este cáncer femenino, el cual muestra la más baja tasa de supervivencia, y del cual, lamentablemente, aún existe muy poco conocimiento.
El cáncer de ovario está catalogado como el séptimo tipo de cáncer más frecuente, que afecta cada año a más de 250.000 mujeres en el mundo, causa aproximadamente 140 mil muertes. Con esta efeméride se pretende fomentar una cultura de sensibilización y prevención, para detectar a tiempo esta enfermedad.
El Día Mundial del Cáncer de Ovario se creó en el año 2013, por iniciativa de un grupo de organizaciones de defensa del cáncer de ovario en todo el mundo.
El cáncer de ovario
Es un tumor maligno localizado en el ovario, y es consecuencia de un crecimiento irregular de células. Generalmente esta patología no suele presentar síntomas en sus primeras etapas y se detecta cuando se extiende a la pelvis y el vientre, por lo cual es más difícil de erradicar, y puede ser mortal.
Los síntomas iniciales de esta patología suelen asociarse a enfermedades digestivas o
intestinales. Algunos de los síntomas característicos del cáncer de ovario son los siguientes, los cuales deben ser corroborados mediante diagnóstico efectuado por un médico especialista:
Dolor e inflamación en el vientre, distensión abdominal, diarrea o estreñimiento, pérdida del apetito, sangrados vaginales anormales, micción frecuente, pérdida de peso, dolor de espalda.
Los principales factores de riesgo de esta enfermedad son los siguientes:
Edad superior a los 50 años, antecedentes familiares, inicio de la menstruación (menarquía) a temprana edad; aplicación de terapias de reemplazo hormonal y tratamientos para la fertilidad,
no haber tenido hijos hábitos y estilo de vida: obesidad, tabaquismo, sedentarismo.
Menopausia tardía, antecedentes ginecológicos previos: endometriosis, quistes ováricos. Es
recomendable asistir a controles ginecológicos periódicos (anuales) para prevenir el cáncer de ovario.
Datos de interés
Se estima que 70 % de los casos se diagnostican tardíamente, en etapas avanzadas de la
enfermedad. Es la sexta causa de mortalidad por cáncer en mujeres. Cada año, en el mundo, se diagnostica a casi 250 mil mujeres con cáncer de ovario y mueren 140 mil mujeres por esta causa. Afecta por igual a las mujeres de países desarrollados y a las de países en vías de desarrollo, y esta patología puede afectar otros órganos, como el útero o la vejiga.
El cáncer de ovario tiene una tasa de mortalidad superior a la del cáncer de mama o el cáncer cérvicouterino. La probabilidad de sobrevivir cinco años, luego del diagnóstico, es apenas de 45%, mientras que la de las mujeres con cáncer de mama es el doble (89%).
Sin embargo, y esto es muy importante, cuando se diagnostica en un estadio temprano (cuando el tumor se encuentra localizado), aproximadamente 94 % de las pacientes viven más de cinco años después del diagnóstico.
Factores de riesgo
Hasta el momento no existen pruebas que permitan detectar la enfermedad en fase temprana, y sus síntomas pueden confundirse con un simple dolor de estómago o enfermedades menos graves. Dado que la enfermedad no se puede prevenir, es importante estar atenta, conocer cuáles son los factores de riesgo, y consultar regularmente al ginecólogo es fundamental para evitar un diagnóstico tardío.
El principal factor de riesgo para cáncer de ovario es la edad. La mayoría de los cánceres
ováricos se origina después de la menopausia. El riesgo aumenta con la edad; es poco común en mujeres menores de 40 años, mientras que la mitad de todos los cánceres de ovario se encuentran en mujeres de 63 años o más.
Ver: American Cancer Society: