Familias residentes en territorio venezolano, cerca de Puerto Santander, expresaron su preocupación por los constantes tiroteos que ocurren en esa población colombiana y la presencia de supuestos irregulares que en varias oportunidades los han amenazado
Armando Hernández
Los hechos ocurridos, durante los últimos días en la fronteriza población de Puerto Santander, en territorio colombiano, no solo mantienen aterrorizados a sus habitantes por la ola de violencia con secuestros y asesinatos, sino a familias del lado venezolano, que en no pocas oportunidades han sido amenazados y amedrentados por miembros de grupos irregulares del vecino, que al ser perseguidos por los organismos de seguridad pasan a nuestro territorio.
Los incidentes armados son muy frecuentes en la población y el último incidente ocurrió en horas de la noche del sábado, cuando se produjo un intenso tiroteo que podía ser escuchado en el lado venezolano, a donde personas nerviosas y asustadas comenzaron a llegar, en busca de refugio ante la balacera que estaba ocurriendo en la carrera, en la carrera 4 con calle 9, sector conocido como “Las Casetas”, vía principal de Puerto Santander, donde se produjo el enfrentamiento entre policías y hombres armados.
Se comentó que todo se inició cuando funcionarios de la policía estaban realizando labores de patrullaje por zona cercana a la frontera y fueron atacados a tiros por sujetos que se desplazaban en motocicletas. El tiroteo se prolongó por más de media y las detonaciones que se podían escuchar desde el lado venezolano, colocaron en estado de alerta a las autoridades que de inmediato tomaron las previsiones respectivas.
El lugar donde ocurrieron los hechos es conocido por la actividad comercial que es desarrollada por pequeños vendedores, que se encargan de distribuir productos que en su mayoría tienen como destino territorio venezolano, especialmente rublos alimenticos, que son adquiridos por revendones. Varios de estos comerciantes debieron huir en medio de las balas, sin tener la oportunidad de cerrar sus negocios, en tanto que otros, que sí pudieron hacerlo, quedaron atrapados en el interior de los mismos, donde debieron lanzarse al piso para procurar no ser alcanzado por una bala perdida.
No obstante, se comenta que varias personas resultaron heridas, entre ellas una mujer que debió ser trasladada, después que todo paso, a un centro asistencial. La balacera desplazó temporalmente a personas que se dirigían a sus casas cuando fueron sorprendidos por el tiroteo y lograron correr hasta el lado venezolano, se comentó más adelante.
El comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, general Óscar Moreno, dijo que el enfrentamiento fue con delincuentes que portaban armas de largo y corto alcance, y que durante el mismo resultaron heridos un policía, uno de los delincuentes y una mujer que fue arrollada por una motocicleta. Voceros comunales por su parte, expresaron que la mujer no fue víctima de accidente como dijo el jefe policial, sino que se trata de una habitante de zona que fue herida de bala al quedar atrapada en la línea de fuego. Por bajo, se comenta que los parroquianos heridos son cinco.
Uno de los lugareños comentó en la zona de Boca Grita, que el enfrentamiento ocurrió entre presuntos paramilitares del Clan del Golfo y la policía, y que los hechos ocurrieron en un sector denominado El Porvenir, donde grupos irregulares mantienen constantes enfrentamientos por el control de la zona, el paso de personas, droga y mercancía hacia Venezuela.
Por su parte las autoridades venezolanas no emitieron información de ningún tipo, aun cuando se supo que durante el tiroteo, los puestos de atención fronteriza fueron alertados, pero la noche trascurrió sin que se presentara ningún incidente en el lado venezolano, donde había nerviosismo por parte de los moradores.
Entre las víctimas se encuentra una mujer que según la policía fue arrollada por un motociclista, en tanto que los lugareños aseguran que recibió un disparo en el pecho