Dos comerciantes del municipio Pedro María Ureña fueron asesinados a balazos, durante este lunes, por sujetos que presuntamente arremetieron contra ellos en represalia por negarse a pagar “vacuna”.

Uno de ellos. Mario Eduardo Fitas Terán, de 36 años de edad, propietario de la discoteca Bahía, en la vía principal del barrio La Guajira, había sido plagiado el día anterior, es decir el domingo, cuando varios sujetos se lo llevaron por la fuerza de su establecimiento nocturno.

El cadáver abaleado de Fitas  Terán fue localizado cerca de la 1:30 de la tarde del lunes, en predios de la hacienda Tienditas, en el municipio Pedro María Ureña.

Tras el hallazgo del cuerpo, las autoridades policiales, que se hicieron presentes en el sitio, le apreciaron tiros en la cabeza.

En cuanto al homicidio del otro comerciante, también este lunes, fue perpetrado poco antes del mediodía.

En el hecho la víctima fatal fue identificada como Luis Enrique Vivas Polania, de  35 años de edad, propietario de “Multiservicios Vivas Car”, ubicado en la urbanización Simón Bolívar, calle 16, galpón 70-79, municipio Pedro María Ureña.

El joven comerciante habría sido víctima de un presunto sicariato, aunque se desconocen las circunstancias en las cuales cometieron el crimen.

Su cadáver, con varias heridas por armas de fuego,  fue hallado en el interior del negocio, hacia las 11:30 de la mañana.

Allí arribaron efectivos del Cuerpo de Bomberos de Ureña, que fueron alertados del hecho; sin embargo, la víctima yacía sin vida y por ende ya era tarde para hacer algo por ella.

En ambos casos, funcionarios del Cicpc-Ureña llegaron a las escenas de los crímenes para colectar evidencias, buscar testimonios y trasladar los cadáveres a la morgue del Hospital Central de San Cristóbal, para dar inicio a las investigaciones de ley.

En la frontera, los asesinatos de los jóvenes comerciantes venezolanos, los habitantes los atribuyen a los grupos subversivos que operan en esa zona de la entidad tachirense.

Miriam Bustos