El mototaxista que transportó la tarde del miércoles a Eli Jacqueline Colmenares Rivas, de 47 años, hasta un motel ubicado en la vía que de Ocaña conduce al sur del Cesar, donde se encontró con su presunto asesino, lamentaba ayer la muerte de la mujer.
“La llevé hasta el motel y ahí estaba el hombre, era como costeño y la recibió normal. Nunca me imaginé una tragedia de tal magnitud”, dijo.
Aunque inicialmente, se presumió que la víctima de este ataque había sido Mayerlyn Conrado, al pasar las horas, algunas compañeras de trabajo y amigas de Colmenares, se acercaron a las instalaciones de la Sijín de la Policía, para alertar a las autoridades de la desaparición de su conocida y que posiblemente se trataría de la mujer que fue asesinada a golpes en el motel.
Una hija de Colmenares Rivas, oriunda de Venezuela, les entregó información a las autoridades sobre el oficio de su mamá. La mujer arribó a Ocaña desde hacía al menos siete años y vivía en el barrio La Rotina.
Entre tanto, una amiga y compañera de Colmenares, la describió como una mujer alegre y que no se metía en problemas.
“Era madre de tres hijos. Tenía su casita bien organizada en el barrio La Rotina, de Ocaña, se había traído a su mamá para pasar la Navidad, una señora de 75 años, muy hermosa y alegre que le gusta el baile. ¿Cómo será cuando se enteré de la muerte de su hija preferida?”, se preguntó la amiga de la víctima, en medio del llanto.
Sobre las 10:00 de la noche, la Policía fue alertada a través de una llamada de los gritos de auxilio que salían de la habitación 4 del establecimiento, por lo que de inmediato, los uniformados arribaron al lugar.
Cuando los policías llegaron a verificar lo que había ocurrido, se percataron de que, sobre la cama, estaba el cadáver de la mujer que fue atacada a golpes en la cabeza y el cuello, por el hombre con el que departía.
Según se conoció, el presunto agresor confesó que, luego de tomar licor y de una discusión con la mujer, terminó golpeándola hasta acabar con su vida.
Sánchez, oriundo de Barranquilla, quedó a disposición de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía y al cierre de esta edición era presentado en audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento, a la espera de que un juez decida si debe ir a la cárcel para responder por la muerte de la mujer.
Prostitución
Cabe recordar que, en las inmediaciones de la plaza de mercado de Ocaña, constantemente se refleja la prostitución, ejercida en su mayoría por mujeres venezolanas, que llegan a este territorio con el fin de buscar una alternativa de ingresos para enviarle dinero a sus familias.
Por ahora, las autoridades avanzan en las indagaciones para esclarecer los móviles del hecho. Reseñó La Opinión