Sucesos
Casa por cárcel otorgaron al Paisa, imputado por narcotráfico y extorsión
16 de noviembre de 2019
Siete personas recientemente capturadas y señaladas por las autoridades de estar vinculadas en graves delitos y acciones ilícitas, recibieron el beneficio de detención domiciliaria, mientras avanzan los procesos en su contra, y entre ellas se encuentra el apodado el Paisa, tristemente célebre por los audios y comunicados amenazante que difundió en la frontera colombo-venezolana.
En la memoria de los habitantes de Villa del Rosario aún retumba la voz amenazante de un presunto sicario que los amenazaba por audios de WhatsApp. Los audios circularon entre septiembre y octubre de este año, refirió en este sentido diario La Opinión.
Añadió que, “para los primeros días de noviembre, la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) capturó a Manuel Antonio León Lancheros, más conocido como el Paisa y señalado de ser uno de los autores de dichas amenazas, así como también por el delito de extorsión”.
A León Lancheros -explica- lo capturaron junto a Carlos Andrés Galvis Cárdenas, alias Rurro, y Ramiro Quintana Domínguez, el Compa, este último presuntamente un sicario a su servicio, pero un juez de control de garantías les concedió detención domiciliaria.
Cabe recordar que, según la Policía, el Paisa era el cabecilla de una banda delincuencial denominada “La Frontera”, que delinque en Villa del Rosario desde 2016. León amenazaba con nombres propios a sus potenciales víctimas, asegurando que asesinaría a los colaboradores de la guerrilla e incluso, en varias de sus amenazas, nombró a funcionarios y organismos policiales y militares venezolanos, ubicados en Ureña, cabe acotar.
Según La Opinión, el caso más reciente en el que un juez ordena una medida de casa por cárcel, pese al delito cometido por los imputados, fue el pasado lunes, cuando policías de la Mecuc capturaron al colombiano Yonny Alexánder Pallares y a los venezolanos M. Labrador y A. Briceño, al momento que iban a bordo de un Spark, blanco, placa HRR806, y cuando les dieron la orden de parar, la omitieron y se dieron a la fuga.
Los hombres debían responder por el delito de porte ilegal de armas, ya que las pistolas que les hallaron no tenían documentos que acreditaran su porte.
Sin embargo, tras quedar a disposición de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía y posteriormente ser llevados a audiencias de legalización de captura, un juez decidió darle el beneficio de casa por cárcel a Labrador, mientras que a los otros dos detenidos los dejó en libertad. (MB)