Jonathan Maldonado
Eran cerca de las 2:15 de la tarde, del sábado 8 de mayo, cuando el cuerpo de Óscar Rangel, mejor conocido como Cachú, cayó sin vida, casi justo al frente de la iglesia Basílica Menor San Antonio de Padua, en el municipio Bolívar, tras ser impactado por varios disparos, propinados por sujetos no identificados.
La multitud se fue acercando a la escena del crimen. Rangel era miembro de la Juventud del Partido Comunista de Venezuela (PCV). Al momento de ser interceptado por los sujetos armados, iba a bordo de una motocicleta Empire, color negro, que era manejada por Richard Rincón, de 32 años, quien resultó herido al caer del vehículo.
De acuerdo con versiones de ciudadanos que lograron evidenciar el suceso, un carro venía persiguiendo la moto en la que se trasladaba Cachú. En la esquina de la iglesia, el conductor pierde el equilibrio y caen sobre el asfalto
Al parecer, el hoy occiso corrió unos 30 metros y cayó al ser impactado por las balas. Al menos 13 casquillos fueron contabilizados por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de la ciudad fronteriza.
El hecho atizó la preocupación entre los habitantes de frontera, pues desde hace aproximadamente dos años no se registraba en una zona tan concurrida, como es el caso de una plaza, el asesinato de un ciudadano.
Al lugar, además del Cicpc, acudieron la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Policía del estado Táchira, Guardia Nacional Bolivariana y Cuerpo de Bomberos de San Antonio del Táchira.
Los funcionarios bomberiles fueron los que se encargaron de trasladar a Rincón al Hospital Samuel Darío Maldonado, donde se le atendió la fractura de tibia que sufrió tras caerse de la moto. Al principio se dijo que este caballero había recibido un disparo en la pierna, pero la versión fue desmentida por los funcionarios.
La incredulidad de la gente se iba disipando una vez se acercaban a la plaza y veían el cuerpo sin vida. Algunos se persignaban; otros murmuraban entre sí. La mayoría pronunciaba el apodo por el cual era conocido Rangel. Las autoridades, por su parte, evitaban que los curiosos se acercaran hasta donde se hallaba el cadáver.
Investigación
Se desconocen quiénes son los autores del crimen. El hecho sigue atado a investigaciones por parte de las autoridades competentes. La Fiscalía Vigésimo Quinta de Control, en el municipio Bolívar, es la que lleva el caso.
Funcionarios del Cicpc se encargaron del levantamiento del cuerpo, que posteriormente fue trasladado por la furgoneta de la institución hacia la ciudad capital de la entidad andina, San Cristóbal.