El caso de la desaparición de la joven madre Luiris Daniela Ledesma Castro, de 19 años, ya es del conocimiento público, una vez se determinó que ese 11 de enero, no llegó a su destino, que era la ciudad de Cúcuta.
Ella continúa desaparecida. Ahora se conoció de la desaparición de otra muchacha, de 23 años, que al igual que Luiris, se dirigía a Cúcuta, el pasado martes 8 de febrero.
Se llama Ana María López Rincón; junto a su familia se encuentra refugiada en el gimnasio La Restauradora, en Capacho, municipio Independencia, pues son de las víctimas que quedaron damnificadas, tras la última tragedia natural ocurrida en Zorca.
Ana María es ama de casa, pero trabaja como doméstica en Cúcuta, y para allá iba el martes.
Salió entre las 6: 15 y 6:30 de la mañana, para hacer unas compras en el vecinos país, pero no llegó a su destino, eso lo constataron sus seres queridos.
Sabían que como ese día no podía cruzar por el puente Simón Bolívar, pues no lo correspondía, por el último número de su cédula, debía irse por las trochas.
Posiblemente allí pasó algo; es lo que mantiene angustiados a sus parientes.
En el caso de Luiris, ya más de un mes sin saber de ella, se pudo conocer que la denuncia por Desaparición ya fue formulada ante el Cicpc, pero a la fecha, no han recibido respuesta alguna.
Para recordar, Luiris es valenciana, pero tiene 3 años viviendo en Ureña, en la aldea La Mulata, concretamente.
Además, es madre de un bebé de apenas 4 años de edad, que, ante las presentes circunstancias, se encuentra al cuidado de su padre.
En el caso de ella y en el de Ana María, las respectivas familias se encuentran desesperadas, ansiosas de que alguien o las mismas autoridades les informen dónde y cómo están, pues en sus hogares hay gente que espera verlas regresar. (MB)