El asesinato del comerciante Dixon Leonardo Ramírez González, de nacionalidad venezolana y 33 años de edad, ocurrido en horas de la mañana del sábado 11 de diciembre, en las inmediaciones del Liceo Maica de Palmira, está aclarado desde el punto de vista policial, con la captura del presunto responsable del crimen, integrante de un organismo de seguridad del estado, que sin tener parte activa en una riña que se produjo entre la víctima y otra persona, lo persiguió y al parecer le disparó en momentos que el ahora occiso intentaba escapar.

La información conocida en medios policiales da cuenta sobre la investigación que fue desarrollada por detectives de la Brigada Contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, delegación municipal San Cristóbal, que en poco tiempo lograron esclarecer lo ocurrido y dar con el paradero del responsable, que resultó ser miembro de un cuerpo de policía uniformada, de la cual no fueron revelados detalles.

Según se explicó, los hechos ocurrieron en la población de Palmira, municipio Guásimos, donde la noche del viernes 10 de diciembre numerosas personas se reunieron para asistir al encendido de luces de Navidad, lo cual se prolongó por varias horas, sin problemas de ningún tipo. Pese a que el evento llegó a su fin, varios asistentes optaron por permanecer en la zona, escuchando música e ingiriendo licor. Entre ellos se encontraba el comerciante Ramírez González, quien estaba acompañado de familiares y amigos.

El grupo permaneció en el lugar hasta que aclaró el día sábado y, según se pudo conocer, entre Dixon Leonardo y un cuñado se produjo una discusión que se tornó acalorada y violenta. Al parecer, debido a las consecuencias de este impasse, Ramírez abordó su vehículo, marca Chevrolet, modelo Corsa, color amarillo, para retirarse del lugar, pero inmediatamente fue seguido por otro carro. Se inició una persecución por las calles de Palmira, hasta que en las inmediaciones del Liceo Maica, vía a La Laguna, se produce el disparo que le causa la muerte, en el mismo lugar de los hechos.

Una bala penetró por el vidrio derecho y alcanzó al chofer, que se desplomó sobre los cojines, en tanto que el Corsa seguía su recorrido unos metros más, hasta impactar contra la acera, lo cual le hizo detenerse, El otro carro también chocó, pero el conductor, en su afán por huir, no se percató que sobre la acera habían quedado algunas piezas que se desprendieron con el impacto y que los detectives del Cicpc colectaron como evidencia.

Las investigaciones desarrolladas por los funcionarios de la Brigada Contra Homicidios – San Cristóbal lograron establecer rápidamente lo que había ocurrido y surgió el nombre del funcionario policial que se encontraba en la zona departiendo con el grupo de amigos y que, al observar lo que había ocurrido, emprendió la persecución del comerciante.

Algunos detalles, considerados como secundarios, faltan por ser aclarados y en ese sentido se está trabajando de manera coordinada con el Ministerio Público. De momento, el funcionario policial permanece detenido en los calabozos del Cicpc, en la avenida Marginal del Torbes. A esta sede policial han acudido al menos veinte personas para ser interrogadas sobre los hechos ocurridos ese día, cuando perdió la vida Ramírez González. Hasta el momento, el funcionario es el único detenido por el homicidio, pero no se descarta la posibilidad que más adelante se proceda a practicar otros arrestos, de personas que estaban en el lugar donde ocurrió la riña y de alguna manera pudieran estar involucradas con este caso de homicidio.