“Colaborar” con los hampones que atracaban el bus no lo salvó de la muerte. A Simón Antonio Duque Mora lo asesinaron de un disparo en el kilómetro 12 de la vía que conduce hacia La Concepción.
Según la reseña del Diario Panorama, el hombre de 45 años subió, junto a su esposa y un bebé de un año, a la unidad de La Concepción-La Paz a las 5:45 am. Iba hacia el cuartel Bermúdez, en el municipio Jesús Enrique Lossada (ubicado al oeste de Maracaibo), para sacarse la cédula de identidad.
“Varios pasajeros nos montamos en el sector El Hoyito. Al bus lo estaban atracando y aún así se detuvo a recogernos. Cuando nos sentamos nos pidieron las cosas. Simón entregó su bolso y la pañalera de la bebé, pero a 200 metros de donde nos subimos los ladrones lo lanzaron del bus, le dispararon y huyeron”, contó llorando su pareja, Celmira González. Manifestó que Duque no opuso resistencia en el atraco, pero cree que “al verle las caras, descubrió quiénes eran y lo mataron. Eran tres delincuentes morenos, de unos 20 años”.
La víctima recibió un tiro de escopeta en el cuello. Tras disparar, los tres asaltantes huyeron hacia el barrio 15 de Julio, en la parroquia San Isidro.
El conductor del transporte público continuó su ruta mientras Celmira gritaba para que parara y pudiera auxiliar a su marido.
Unos 500 metros más adelante de donde quedó el cadáver, González logró bajar de la unidad: “Solo cuando le dije que no tenía cómo pagar el pasaje porque se llevaron todo, detuvo el bus”.
Con la bebé en brazos, la mujer desesperada trató de socorrerlo, pero Simón falleció instantáneamente.
“A Simón lo habían atracado en la misma ruta hace un mes, por eso estaba indocumentado. Ahora me quedo sola. Él era un hombre responsable, amoroso y serio”, se lamentaba González.
Duque era técnico en construcción civil para mantener a sus seis hijos. Según su familia, era funcionario del Centro Rafael Urdaneta (CRU).