Sucesos
Intentaron llevar a sus enemigos a la cárcel con denuncias falsas
10 de mayo de 2021
En el barrio Rómulo Gallegos fue apresado un hombre que denunció a su vecino por haberle robado su celular y doscientos mil pesos colombianos, que durante las investigaciones le fueron encontrados en su poder; en tanto que en el 23 de Enero aprehendieron a una mujer que denunció a su expareja por golpearla y robar cosas de su hogar, lo cual nunca ocurrió
Dos casos de simulación de hecho punible, en los cuales se acudió a las autoridades policiales para presentar denuncia sobre hechos no ocurridos, con el propósito de llevar a otra persona a la cárcel e involucrarla en líos judiciales, fueron aclarados por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalistas, que no solo sacaron en limpio el buen nombre de las víctimas, comprobando su inocencia, sino que además evitaron que fueran privadas de libertad de manera injusta.
Por las declaraciones suministradas por el comisario general Wilmer Enrique Uribe Guerrero, director del Cicpc Táchira, se sabe que ambos hechos ocurrieron en la zona de La Concordia, cuando un hombre denunció a su vecino por el robo de un celular, y en el otro caso, una mujer acusó a su expareja de violencia de género y hurto de objetos de su residencia.
Según lo explicado por el vocero policial, en el primero de los casos fue detenido un ciudadano identificado como J. F. Rincón Duarte, de nacionalidad venezolana y 41 años de edad, con residencia en la calle principal del barrio Rómulo Gallegos, en La Concordia, quien se presentó ante la sede detectivesca con la finalidad de denunciar a un vecino, que lo había despojado de su teléfono celular, marca Samsung, modelo J5, y doscientos mil pesos en dinero efectivo.
Uribe explicó que el caso fue asignado a efectivos de la Brigada Contra Robos, de la delegación municipal San Cristóbal, que de inmediato iniciaron las investigaciones para ubicar al presunto asaltante, sobre el cual el denunciante había aportado bastante información.
Rincón Duarte, quien sufre de discapacidad, dijo al momento de denunciar que el supuesto ladrón se había aprovechado de esa situación para cometer el hecho. Cuando los funcionarios ubicaron al ciudadano denunciado, este expresó su sorpresa y estupor por lo que estaba ocurriendo, negando cualquier participación en un hecho de este tipo, y al saber que su vecino lo había denunciado, informó sobre una situación de enemistad manifiesta que desde hace algún tiempo existe entre los dos hombres. La honestidad y honradez de la persona denunciada fueron verificados con los vecinos, que dieron fe de ello, por lo que de inmediato las investigaciones tomaron otro rumbo.
La posibilidad de un hecho inventado asomó entre los investigadores, que de inmediato fueron a buscar al denunciante, en cuyo poder encontraron el celular que había denunciado como robado. Durante los interrogatorios admitió que, efectivamente, tenía problemas personales con su vecino y como venganza había decidido denunciarlo. Rincón Duarte quedó detenido, a órdenes de la Sala de Flagrancias del Ministerio Público, acusado de los presuntos delitos de simulación de hecho delictivo y falsedad en actos y documentos, por lo que se encuentra tras las rejas en la sede del Cicpc, en la avenida Marginal del Torbes.
Asimismo, el jefe policial dijo que en el segundo caso, ocurrido en el barrio 23 de Enero, parte baja de La Concordia, se logró la aprehensión de una mujer, identificada como I. M. Sánchez Pineda, de 42 años de edad, quien acudió a la sede del Cicpc con el propósito de denunciar a su expareja por violencia contra la mujer y robo.
Ella manifestó que el hombre la había golpeado fuertemente y además se apoderó de algunas de sus pertenencias, entre ellas dos bombonas de gas y un equipo de sonido. Las investigaciones fueron asignadas a un equipo de expertos, que se encargarían de analizar la versión que sobre los hechos presentó la denunciante, encontrando puntos de inconsistencia que hicieron sospechar que nada era verdad. Establecieron contacto con la persona denunciada, a quien entrevistaron sobre los hechos y esta manifestó que los mismos jamás habían ocurrido.
Los detectives fueron a la casa de la denunciante a fin de conversar con ella y obtener más detalles para despejar dudas y pudieron comprobar que las bombonas y el equipo de sonido denunciados como robados estaban en su vivienda.
Sánchez Pineda admitió la falsedad de los hechos, dijo que en efecto nunca fue agredida y que todo fue inventado, como venganza a causa de problemas con su expareja. Fue detenida y, al igual que en el caso anterior, presentada ante el Ministerio Público, por el delito de simulación de hecho punible.(AH)