Sucesos
Investigan hechos donde murió un reciclador cuando manipulaba artefacto explosivo
17 de diciembre de 2017
Un hombre de oficio reciclador falleció, mientras que dos de sus familiares resultaron gravemente heridos en momentos que intentaban abrir una ojiva de mortero, la cual aparentemente encontraron en predios del polígono de tiro de la unidad militar en Vega de Aza, y por desconocimiento accionaron el aparato, el cual estalló y causó la tragedia en un rancho en el parcelamiento Torondoy, en Vega de Aza, municipio Torbes.
La víctima fatal del trágico hecho fue identificada como Jhoneglis Jesús Marín Maldonado, de 30 años, mientras que los heridos responden a los nombres de Maryuli Jaimes Maldonado, de 27, y Marco José Altuve, de 15 años de edad.
El suceso ocurrió a las 4 de la tarde del pasado viernes; y según los testimonios recabados por las autoridades policiales, el reciclador junto a los dos miembros de su familia laboraban compactando desechos ferrosos. Y entre ellos, uno de apariencia extraña, el cual se asegura que fue golpeado en uno de sus extremos por el hombre de 30 años con un martillo, lo que ocasionó que explotara, matándolo de inmediato.
A pocos metros y de acuerdo con los testimonios, se hallaban las otras dos personas, quienes fueron alcanzadas por la onda explosiva y por lo tanto seriamente heridos por numerosas esquirlas que se les incrustaron en extremidades superiores e inferiores.
La situación, que fue observada por vecinos de las víctimas, les permitió alertar a miembros de organismos de socorro y autoridades, que acudieron hasta el lugar para prestarles los primeros auxilios.
Paramédicos de Protección Civil del municipio Torbes, así como regional, fueron los encargados de atender en el sitio a los sobrevivientes de la explosión; y una vez estabilizados en los signos vitales, les trasladaron al Hospital Central.
En cuanto al cuerpo del hombre fallecido, fue levantado por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, quienes además realizaron pesquisas de los restos del artefacto que estalló.
Trascendió a los medios de comunicación que la víctima fatal junto a sus familiares, acostumbraban a colectar chatarra y desechos en predios de la unidad militar que está ubicada en Vega de Aza; y aparentemente en esas labores se encontró el pertrecho militar, que no explotó en el momento que fue utilizado, presuntamente durante prácticas de entrenamiento.
Pese a esta versión, los encargados de las investigaciones sólo están a la espera que los sobrevivientes se repongan de las heridas para que brinden su versión.
Pablo Eduardo Rodríguez