En flagrancia, funcionarios adscritos a la Dirección de Inteligencia y Estrategias Policiales –Diep- de Politáchira desarticularon una banda organizada de ladrones que tenía azotada la parte alta de la ciudad, con los constantes robos y hurtos que cometían.

Con la aprehensión de tres sujetos, la banda “Los Willys” se ve mermada en su accionar contra residencias y locales de la zona.

Las detenciones las practicaron los funcionarios policiales en las instalaciones de la Universidad de los Andes-Táchira, en el sector Santa Cecilia, mientras sustraían equipos de ese recinto universitario, es decir, bienes del Estado.

En este sentido, el director de Politáchira, comisario general Wilman Rivera Torres, reiteró que la agrupación hamponil sembraba zozobra en la parte alta de la ciudad y a ella se le atribuye la mayoría de robos que en horas de la madrugada ocurrían en Pueblo Nuevo, Las Pilas, Ferrero Tamayo y Barrio Obrero.

“Gracias a la pronta denuncia, nuestros funcionarios realizaron un trabajo de inteligencia siguiendo la pista de los mismos para poder capturarlos”, acotó Rivera.

Las investigaciones adelantadas por la Diep, que se prolongaron al menos tres semanas y que iniciaron con base en una serie de denuncias de víctimas de robos y hurtos, permitió seguirles los pasos a los delincuentes, hasta capturarlos, infraganti, en el interior de la universidad.

Y no se descarta que esta misma banda sea la misma que, en meses anteriores, casi saqueó la ULA.

Una vez interceptados y sometidos, los tres hombres fueron trasladados a la Comandancia General de Politáchira, donde quedaron identificados como: W. López, de 38 años de edad, quien presenta prontuario policial por robo, lesiones y tenencia de droga; R. Pérez, de 29 años de edad, con prontuario por hurto agravado, y J. Ordóñez, de 28 años, quien tiene prontuario por tenencia de droga.

Les incautaron: un casete de computadora; dos impresoras; un monitor de computadora; un proyector; una máquina de escribir eléctrica; un ventilador de pedestal portátil; una maleta de lona y cinco segmentos de cable para Internet, de aproximadamente de 40 metros   de longitud.

Ellos y la evidencia quedaron a disposición de la Fiscalía de Flagrancia del Ministerio Público. (MB)