Otros dos venezolanos fueron asesinados e yiros durante las últimas horas, en hechos registrados en Cúcuta y en Saravena, Colombia.
En el primer hecho, la víctima fue identificada como Carlos Arturo Chirinos Cuadros, carabobeño, e 30 años, a quien el sábado en la noche, un hombre identificado como “William”, le disparó en la casa que ocupaba con su esposa y dos hijas.
Ocurrió cerca de la medianoche en la calle 6 con avenida 0 del barrio Trigal del Norte, Cúcuta, donde en la segunda planta, Chirinos vivió los últimos dos meses con su familia. Allí llegó William, quien luego de discutir con él, le disparó.
Mal herido, el venezolano trató de huir hacia la planta baja, pero fue perseguido por el homicida, que sin piedad lo remató y huyó. Chirinos era vendedor informal en la calle.
Miembros de la Brigada Interinstitucional contra Homicidios (Brinho) practicaron la inspección y el posterior levantamiento del cadáver.
Posteriormente se determinó que Chirinos había sido capturado en octubre de 2016, por la Policía Metropolitana de Cúcuta, junto a tres hombres, señalados de cometer atracos en la ciudadela Juan Atalaya.
En ese procedimiento incautaron una pistola de fogueo, un vehículo y dos celulares valorados en900 mil pesos.
En Saravena
Mientras, Sarare, municipio de Saravena, este domingo al mediodía de este domingo 24 de febrero, otro joven venezolano fue asesinado, y cerca del cadáver dejaron un cartel en el que señalaban las razones del homicidio.
El muchacho, cuya identidad no se suministró, pero sí su identidad, habría sido víctima de una presunta “limpieza social”, implantada por elementos al margen de la ley que operan en esa zona de dominio del Ejército de Liberación Nacional –ELN- y disidencia de las Farc.
El hecho tuvo lugar en las inmediaciones de las antiguas instalaciones del Idema. La víctima trabajaba como estilista en la Barbería Arthur Fashion, desde hace unos días. Su reciente jefa manifestó que el muchacho era de bajos recursos, con necesidades, pero que era responsable y se desempeñaba muy bien en su labor.
Este domingo, unos sujetos armados llegaron a la barbería, lo sacaron por la fuerza y lo trasladaron hasta las antiguas instalaciones del Idema, desvío hacia el Alto de San Miguel, donde finalmente lo asesinaron. Dejaron una nota en la que se leía “ladrón de motos, ojo padres de familia”.
Miriam Bustos