Mediante un escrito, Yelitza E. –así se identificó-rechazó las acusaciones que  la vincularon con trato cruel e inhumano a sus hijas, en relación a la información que la semana pasada, dieran los organismos policiales, al detenerla indicando que se hacía  “luego de recibir una denuncia formal sobre la presunta rumba, que durante dos días mantenían en un apartamento de Pirineos II, donde se encontraban dos niñas de 12 y 15 años, hijas de una de las detenidas”.

Yelitza E. -como se le reseñó en las informaciones dadas por funcionarios del GAES 21-Táchira- dijo estar residenciada en el Bloque 13 de Pirineos II y fue detenida por el CONAS hace una semana, junto a su pareja y una amiga,  señalada de presunto trato cruel e inhumano de sus hijas, resistencia a la autoridad y desacato al decreto de cuarentena social, solicitó aclarar ante la colectividad , lo que a su juicio, ocurrió realmente.

A continuación lo expuesto por la dama en el escrito:

“Quiero desmentir ante la opinión pública la información aparecida en la página de sucesos de fecha 29-04-2020, donde publican una fotografía y una información de un procedimiento realizado por funcionarios del Gaes21-Táchira (Conas) .  A finales del mes de abril mis dos hijas cumplieron 12 y 15 años respectivamente, yo también cumplí años, por esta razón mi pareja y yo decidimos comprar la torta para las niñas, hacer una pequeña parilla y  pasar unos momentos agradables en medio del drama de la situación  país y de la pandemia del coronavirus;  vecinos de los apartamentos contiguos pueden dar fe de este ameno compartir. Sin embargo, presumo que una vecina que mantiene contacto permanente con el padre biológico de mis hijas (Mayor de la Guardia Nacional  Edwin U. mi exesposo)   le enfermó la mente con intrigas, para que este ordenara la ejecución de un procedimiento irracional  a través del Conas, atropello ante el cual como seres humanos no podíamos ser indiferentes y reaccionamos para defendernos”.

“ Es falso y una infamia expresar que durante dos días, mis hijas no fueron correctamente atendidas y pudieron haber presenciado escenas subidas de tono con mi pareja.  Los días a los que  hace referencia  la nota de prensa corresponden al domingo 26 y lunes 27 de abril,  mis propias hijas pueden dar testimonio que el día 26 de abril desayunaron arepas con mortadela y café, almorzamos arroz con pollo y para la cena  preparamos pasta con salsa de tomate y tajadas. El día lunes 27 de abril nos levantamos tarde, por esa razón no se preparó desayuno, pero como nos visitó una amiga, ella  no ayudo a preparar un hervido, lamentablemente nos disponíamos a comer y llamar a las niñas que estaban en el apartamento de otra vecina, a la que se le paga para que  oriente la realización de las tareas virtuales  que asignan en la actualidad, pero el Capitán a cargo del operativo no permitió que nadie comiera, allí quedo el hervido que se echó a perder.”

“Aprovecho la oportunidad para informar que la colaboración que el  Mayor U. da para las  niñas, no es suficiente para cubrir sus necesidades, gracias a Dios  que mi pareja y yo somos trabajadores emprendedores, en el área de los cauchos y la peluquería, por esta razón siempre  procuramos la buena alimentación y atención de las niñas…si no hay gas, cocinamos con electricidad y sino con leña”  dijo  en el escrito Yelitza, al pedir al Mayor  respeto a su vida “privada y que actué con madurez…basta de acoso ”.