Un obrero de 46 años fue detenido por una comisión mixta de la Dirección de Inteligencia y Estrategias Preventivas (Diep) y de la Brigada Rayo de Politáchira, señalado de cometer actos lascivos y abuso sexual a dos niñas de 10 años, en la aldea La Tinta, municipio San Cristóbal.
La detención de Edecio C. la practicaron en el sector Villa Paraíso, luego de que fuera denunciado por los delitos antes mencionados.
Fue la madre de una de las infantas la que formuló la denuncia ante la Diep, luego de que, en conversación con la menor, esta le revelara que Edecio, quien cuidaba una casa vecina, la había tocado inapropiadamente, dos meses antes.
La dama buscó ayuda legal y así llegó a la Diep, cuyos funcionarios la asesoraron; entrevistaron a la niña, quien reafirmó lo que le dijo a la madre y agregó que el sujeto la obligaba a que también tocara sus partes íntimas, y después le daba dinero para que se mantuviera callada.
También confesó que lo mismo habría ocurrido con otra niña de su misma edad, vecina de la aldea, quien para ese momento no había sido identificada.
En virtud de esta situación, la Diep inició el procedimiento por el delito de actos lascivos, pero una vez la menor fue valorada por un especialista en Medicatura Forense, se determinó que había sido abusada sexualmente, quedando bajo tratamiento psicológico.
Al otro día, la Diep y la Brigada Rayo fueron en busca del sospechoso, ubicando la finca en la que trabajaba; sin embargo, en ese momento se encontraba en labores de campo, alejado de la misma.
Casi todo el día aguardaron los funcionarios por el retorno del hombre, siendo al término de su jornada laboral, ya en horas de la noche, cuando regresó y lo aprehendieron, siendo puesto a disposición de la Fiscalía 16ª del Ministerio Público.
Al mismo tiempo, la Diep se activó para practicar diligencias de extrema urgencia que, aplicando el artículo 236 del Código Orgánico Procesal Penal, permitieron esa misma noche procesar la orden de aprehensión ante un tribunal de Control, quedando la audiencia de presentación para el día siguiente.
Al día siguiente, los policías ya habían logrado identificar a la otra niña que había sido abusada y al ser llevada ante el tribunal, como prueba anticipada, la pequeña relató lo ocurrido y en razón de que, sin lugar a dudas, estaban ante la presencia de los delitos de actos lascivos y abuso sexual infantil, se decretó la privativa de libertad al sujeto, ordenando su reclusión en el comando de Politáchira, en La Concordia.
Miriam Bustos