Treinta años debería permanecer tras las rejas un instructor de béisbol que fuera acusado de presuntamente haber abusado de nueve niños, alumnos de una escuela de béisbol ubicada en la urbanización Monseñor Padilla de la ciudad de San Carlos, estado Cojedes, adonde los padres, sin sospechar nada, llegaban para dejar a sus hijos en manos de este sujeto que tenía la responsabilidad de entrenarlos en la práctica del popular deporte.

El hecho, que causó gran conmoción en medios deportivos de ese estado, fue descubierto cuando uno de los niños, que había manifestado un gran entusiasmo por la práctica del béisbol, repentinamente pareció haber perdido ese entusiasmo y se negaba a asistir a los entrenamientos. Debido a que sus padres notaron cierto temor cada vez que trataban el tema, se dispusieron a averiguar qué estaba ocurriendo y ganándose la confianza del menor, lograron que este contara la razón por la cual su emoción por el deporte había desaparecido. Entre llantos, el niño acusó al instructor de abuso sexual.

Aturdidos e indignados, los progenitores del niño acudieron a la sede del Cicpc en San Carlos, donde presentaron denuncia. Este primer caso trascendió e hizo que otros padres conversaran con sus hijos, y así se descubrió que otros habían pasado por la misma situación.

En pocas horas fueron presentadas tres denuncias, tras lo cual los detectives fueron a la calle en busca del sospechoso, que solía frecuentar los diversos  campos deportivos de la ciudad.

Recorrieron varios lugares en su busca, hasta que lo encontraron en el estadio de béisbol del sector Monseñor Padilla, en San Carlos, donde fue aprehendido y trasladado a la sede policial para ser interrogado.

Por lo espinoso del caso, las autoridades no revelaron mayores detalles, pero se comentó que pronto el número de niños, presuntamente abusados, ascendió a nueve. El instructor fue colocado a las órdenes de la Fiscalía VI del Ministerio Público, junto a las actas policiales instruidas y la evidencia incautada durante la investigación, que resultaron contundentes. El fiscal acordó llevar a juicio a Mercado López, venezolano de 40 años de edad, por presunto abuso sexual a nueve niños que acudían para recibir entrenamiento en una escuela de béisbol, donde el hombre laboraba como instructor.

El Juzgado III de Juicio de la circunscripción judicial del estado Cojedes concluyó que había suficientes indicios que vinculaban al acusado con los delitos que se le imputan. Mercado fue condenado por los delitos de abuso sexual, en grado de continuidad, y amenazas, previstos en los artículos 259 del primer y segundo apartes de la Ley Orgánica de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (Lopnna).
El proceso judicial se inició en el mes de febrero del presente año y finalizó en los primeros días de diciembre, con una sentencia condenatoria de 30 años de cárcel.

Armando Hernández