Sucesos
Uno de los fallecidos en accidente de tránsito en San Antonio presentó impacto de bala
11 de febrero de 2022
Jonathan Maldonado
Un aparatoso accidente, registrado al mediodía de este jueves, dejó dos personas fallecidas a la altura del aeropuerto internacional Juan Vicente Gómez, en San Antonio del Táchira.
La colisión se produjo entre dos camionetas. La más joven de las dos personas que perdieron la vida, identificada como Miguel Ángel González, de 27 años, iba como copiloto en una camioneta Fortuner, color blanco, quien presentó un impacto de bala en el cuello.
Se presume que el conductor de la Fortuner, quien huyó tras el siniestro, iba a una velocidad bastante elevada y terminó colisionando con la otra camioneta, una Terios, color champagne, conducida por Eduardo Colmenares, de 84 años, quien falleció tras el impacto.
El cuerpo del octogenario quedó dentro de la camioneta, mientras que el de González yacía sobre el asfalto, al momento en el que arribaron las autoridades al lugar.
El Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Policía Nacional Bolivariana (PNB), Bomberos de San Antonio y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) estuvieron presentes en el lugar del choque.
Los daños provocados en los vehículos dejan interpretar la magnitud del golpe y permiten deducir la velocidad que llevaba una de las dos camionetas, en especial por parte del conductor de la Fortuner blanca.
El levantamiento de los cuerpos fue realizado por el Cicpc de San Antonio, mientras que los carros fueron removidos por una grúa que presta servicios a la PNB.
Trascendió que Colmenares, de 84 años, era residente de la ciudad de Capacho.
Bloqueada la vía
Largas filas de vehículos se registraron en ambos sentidos de esta vía nacional que comunica al municipio Bolívar con la jurisdicción vecina, Pedro María Ureña.
La colisión se registró justo a la altura del aeropuerto internacional Juan Vicente Gómez y a escasos metros de la entrada a la parroquia El Palotal.
Durante casi dos horas estuvo la vía cerrada, mientras los organismos de seguridad ciudadana efectuaban su trabajo.
A cada instante, los ciudadanos que se acercaban a ver la colisión eran retirados por los funcionarios, quienes insistían en que debían mantenerse distanciados de la escena para no entorpecer el procedimiento.