Un fallo crítico en el software central de Starlink dejó sin internet a millones de usuarios en los cinco continentes durante dos horas y media la madrugada del sábado. La interrupción, la más prolongada en la historia del servicio de baja órbita de SpaceX, afectó desde hogares rurales en Estados Unidos y aviones comerciales hasta el Ejército de Ucrania, que depende de la red satelital tras los ataques rusos a la infraestructura terrestre.

Michael Nicholls, vicepresidente de ingeniería de Starlink, confirmó que el corte se originó en “un error de configuración en los servidores de gestión de red”. Las terminales dejaron de recibir señal a las 02:07 UTC; la restauración total llegó a las 04:37 UTC. “Hemos identificado la raíz y aplicado parches redundantes. Estamos comprometidos a que este tipo de incidentes no se repita”, afirmó Nicholls en un comunicado publicado en X, la red social de Musk.

Despliegue militar y conectividad civil, ambos en riesgo

El Ejército ucraniano, que utiliza terminales Starlink para comunicaciones tácticas y drones de reconocimiento, reportó “pérdida brusca de enlace” en varios frentes del Donetsk. Fuentes del Ministerio de Defensa de Kiev aseguran que las operaciones continuaron gracias a redes de respaldo, pero admitieron que la caída “expuso nuestra dependencia” de la tecnología privada.

En el ámbito civil, más de 3 millones de abonados —desde ranchos australianos hasta cruceros en el Caribe— vieron desaparecer la conectividad que Starlink promete como “ultra-fiable”. Aerolíneas como United y Air Canada, que ofrecen Wi-Fi satelital a bordo, también notificaron interrupciones transitorias.

Un récord de satélites que no evita fallos humanos

La constelación de Starlink supera los 5 500 satélites operativos, la mayor flota activa en órbita baja. Sin embargo, la complejidad de gestionar un sistema tan extenso depende de software terrestre que, en esta ocasión, falló. Expertos en ciberseguridad satelital señalan que los errores de configuración siguen siendo la causa número uno de interrupciones en redes LEO (Low Earth Orbit).

Este no es el primer tropiezo: en 2022 hubo cortes parciales debido a tormentas solares; en 2023, una actualización mal implementada dejó a 20 000 usuarios sin servicio durante 25 minutos. Ahora, la duración se multiplicó por seis.

Musk, entre la eficiencia tecnológica y la política

Elon Musk, recién salido del Departamento de Eficiencia Gubernamental de EE. UU., aprovechó su cuenta en X para pedir disculpas y prometer auditorías externas. “La perfección es imposible, pero la resiliencia sí es alcanzable”, escribió.

Paralelamente, el magnate anunció que su nuevo partido político, América, competirá en elecciones intermedias bajo un discurso centrista. Su donación récord de 200 millones de dólares a la campaña de Donald Trump en 2024 sigue generando especulaciones sobre contratos gubernamentales para SpaceX.

Reacción de mercado y próximos pasos

Las acciones de SpaceX, que cotizan en mercados secundarios, cayeron un 4 % tras la noticia. Los analistas de Morgan Stanley estiman que el incidente costará a Starlink entre 15 y 20 millones de dólares en créditos de servicio.

La compañía ha prometido publicar un informe técnico completo en 72 horas y desplegar actualizaciones automáticas para evitar fallos manuales. Mientras tanto, los usuarios revisan sus contratos y el Ejército ucraniano acelera planes de diversificación de proveedores.