Carlos Ramírez López *
Todo juicio es una batalla, y en este caso el escenario donde se vienen librando una gran cantidad de ellas contra Venezuela es en un tribunal denominado CIADI convertido en cementerio de esperanzas para la reconstrucción económica, y no solo es que las matan a punta de sentencias condenatorias, sino que también en la oscuridad de los secretos de grandes bufetes se tejen pérfidos negociados que dan pie a la maldición gitana “entre abogados te veas”.
QUE ES EL CIADI
Es un tribunal internacional de arbitraje creado por el Banco Mundial para resolver reclamaciones comerciales entre países o entre un país y nacionales de otro, está dirigido a la protección de inversiones internacionales. Se rige por el Tratado Convenio CIADI.
EL PROBLEMA QUE ALLÍ TENEMOS
En 1995 dicho Convenio entró en vigor para Venezuela, pero fue renunciado por Hugo Chávez el 24 de enero de 2012 renuncia que se hizo efectiva seis meses después, el 25 de julio 2012, lapso dentro del cual, con ocasión de la retahíla de expropiaciones que decretó, se desató una imparable estampida de demandas. Gran parte han sido cerradas por sentencias condenatorias y otras por oscuros acuerdos de pago. En esos juicios quien representa a Venezuela usurpando el cargo de procurador es un abogado de Maduro, Reinaldo Muñoz Pedroza, cargo que en realidad ostenta con legitimidad el Dr. José Ignacio Hernández designado por Guaidó con aprobación de la Asamblea Nacional como así lo manda la constitución, pero no lo reconocen en ese tribunal. Le permitieron actuar en el expediente ConocoPhillips-vs-Venezuela, pero simultáneamente con el usurpador, y como lo expliqué en mi artículo anterior, lo hizo mal, muy mal, pésimo.
Nuestro Procurador J.I. Hernández ya sufrió un revés en el caso Favianca&Owens Illinois contra Venezuela en el justo reconocimiento que exigió como representante legítimo de Venezuela. La dura respuesta del CIADI a favor del usurpador abogado de Maduro que recibió en ese caso fue: “Venezuela está siendo representada por abogados de la oficina del Procurador General como lo exige su ley nacional…La evidencia en el expediente no justifica un cambio en el estatus quo”. Aún nos quedan 15 multimillonarios casos pendientes y sin poder defendernos. Es nuestro principal problema en ese escenario.
QUE HACER
Hasta estos momentos ni Guaidó, ni la Asamblea Nacional tienen una línea clara sobre que hacer con semejante problema y ese es el propósito de este escrito, ofrecer un diagnóstico comprensible, llamar la atención sobre ello y formular una propuesta específica de actuación que pasa primero por examinar el terreno donde se desarrollan esas batallas para entonces diseñar táctica y estrategia para enfrentarla.
COMENCEMOS: EL CIADI DEPENDE DEL BANCO MUNDIAL
Este tribunal está creado por el Banco Mundial, institución de larga historia que nace al finalizar la segunda guerra mundial con el propósito de asistir a la reconstrucción de Europa, pero en el devenir del tiempo amplió esos objetivos. Hoy está destinado a la asistencia financiera de los países en desarrollo como una necesidad protectora de los capitales que se invirtieran en ellos. Este Banco creó un organismo con capacidad de decidir los conflictos con los inversionistas fuera de las jurisdicciones nacionales, este organismo fue el antes explicado tribunal de arbitraje CIADI el cual se rige conforme a un Convenio formulado por los Directores Ejecutivos del citado Banco Mundial.
CONTEMOS NUESTROS CAÑONES
En la estructura del Banco Mundial existe un Consejo Consultivo integrado por 15 países con poder de voto de acuerdo con el capital que le aportan. Allí Estados Unidos tiene el mayor poder (15,98%). También están China y Rusia, pero entre los dos no alcanzan ni a la mitad, sumados tienen el 7,24%. Entre los restantes 12 miembros se encuentran Japón, Alemania, Francia, Reino Unido, Canadá, Brasil, que también reconocen a nuestro legítimo gobierno de Juan Guaidó. Esto evidencia que podemos tener una fuerza decisiva para que en el CIADI se tome la decisión de expulsar al usurpador y reconocer exclusivamente nuestra representatividad para litigar los casos que allí nos involucren y además nos tomen en serio cuando hagamos el planteamiento sobre la nulidad de los fallos dictados en los casos donde no hemos tenido representación legítima.
OTRO PUNTO DE ATAQUE
Resulta que a la sombra de estos procesos en el CIADI ha surgido un floreciente negocio de usura en el que grandes empresas constituidas para eso compran los derechos de las demandantes obteniendo ganancias que multiplican hasta mucho más del cien por ciento lo invertido. Esto por ejemplo ocurre en el caso Crystallex contra Venezuela donde nos condenaron a pagar 1.400 millones de dólares.
LOS DENOMINADOS “FONDOS BUITRE” HACEN SU AGOSTO CONTRA VENEZUELA
Una investigación periodística revela que la firma denominada Tenor Capital le había comprado a Crystallex el 80 por ciento de los derechos del juicio por la suma de 76 millones y del pago por la condena en nuestra contra recibirá 800 millones. Especulación abusiva, agiotismo puro, al amparo de fraudes cobijados por el CIADI
Fuente: https://lta.reuters.com/articulo/idLTAL1N1YQ0DA
EL CIADI SE CONVIERTE EN INSTRUMENTO PARA LA USURA
Un sencillo razonamiento lógico nos lo dice: Si Crystallex vendió en 76 millones el 80% de los derechos por los que demandó a Venezuela como reparación de daños y la sentencia le concedió 1400 millones significa que fue una condena excesiva que en todo caso no podría haber pasado de 100 millones. Se inflaron desmesuradamente los presuntos daños. Esto es inadmisible pues se desfigura el propósito de dicho tribunal que en vez de hacer justicia hace injusticia dando enriquecimientos ilícitos.
ESA SENTENCIA Y TODAS LAS AFECTADAS DEL MISMO VICIO ES ANULABLE
El convenio CIADI rige para resolver diferencias en litigios solo entre quienes formen parte de este por lo que esos fondos de capitales que compran derechos litigiosos en la práctica sustituyen a esas partes del Convenio convirtiéndose en partes ocultas de los procesos y producen desfiguración del objetivo de la creación del organismo, un fraude. La variación de las partes es base para plantear la nulidad de los juicios donde tales transferencias hayan ocurrido. Mal puede el CIADI estar dando resarcimiento a un tercero que no forma parte del contrato que se acusa violado.
RESUMEN DE LA RECETA PARA GANAR JUICIOS EN EL CIADI
1) Juan Guaidó debiera dictar un Decreto ratificado por la Asamblea Nacional para reingresar al Convenio CIADI
2) De la mano de nuestro principal aliado internacional, Estados Unidos de Norteamérica, y blandiendo el apoyo de los otros 50 países que tenemos, se debe ejercer una fuerte actividad político/diplomática ante el Banco Mundial para que se reconozca dicho reingreso y nuestra condición de únicos representantes legales de Venezuela ante el CIADI y subsiguiente expulsión de la representación del régimen usurpador de Maduro.
3) De inmediato plantear ante el CIADI, en cada uno de los expedientes tramitados contra Venezuela, la ilegitimidad de quienes se adjudicaron la representatividad del cargo de Procurador General desde el 11 de marzo de 2012 cuando Cilia Flores renunció el cargo y dejó como encargado a Manuel Galindo y luego este en fecha 22 de diciembre de 2014 dejó como encargado a Reinaldo Muñoz Pedroza quienes nunca cumplieron con el requisito constitucional de la aprobación de la Asamblea Nacional, lo cual debe producir nulidad de todo lo actuado por esos usurpadores pues se nos ha privado de derecho a la defensa.
4) De inmediato también se deben revisar todos y cada uno de los juicios tramitados ante el CIADI donde se nos hayan condenado para detectar los casos de cesión de derechos o venta de acciones de las demandantes a fondos buitres para verificar si obtuvieron el consentimiento del Estado demandado y si se hizo la correspondiente notificación al tribunal.
5) Desatar una tormenta de demandas de nulidad de todo laudo viciado por las irregularidades.
Pendiente para otro artículo sobre la renuncia a la jurisdicción. //@CarlosRamirezL3