Chapecó, Brasil (AFP) Con un evento en su estadio, el club brasileño Chapecoense homenajeó este lunes a las 71 víctimas del accidente aéreo ocurrido hace cinco años en Colombia cuando se dirigía a jugar la final de la Copa Sudamericana-2016.
El ‘Chape’ reunió al caer la tarde a familiares de los fallecidos y a miles de hinchas en el Arena Condá, su sede en la ciudad de Chapecó, en Santa Catarina (sur), para rendir honores a los jugadores, directivos, miembros del cuerpo técnico y periodistas que perdieron la vida cuando el avión en el que viajaban se estrelló a poco de aterrizar en el aeropuerto de Medellín.
El acto, convocado bajo la consigna «Para siempre recordados», contó con videos emotivos, varios cantantes y un youtuber evangélico que oró por las víctimas, recordadas como «eternos campeones».
El vuelo trasladaba al equipo desde Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia, hacia Colombia, donde debía disputar la final de la Copa Sudamericana contra Atlético Nacional. Tras el accidente, el Chapecoense fue declarado campeón del torneo.
El domingo, el club colombiano recordó a los brasileños. «Una amistad para la eternidad», dice en la cuenta de Twitter del Atlético Nacional junto a imágenes del ‘Chape’.
Tras el accidente, el club brasileño quedó diezmado y con problemas financieros.
Entre los seis sobrevivientes hubo tres futbolistas: Allan Ruschel, quien siguió jugando y actualmente integra el América Mineiro; Neto, quien se retiró en 2019 sin lograr volver al campo por las secuelas del accidente; y Jakson Follmann, exarquero, quien sufrió la amputación de una pierna y se reinventó como orador y cantante.
Chapecoense descendió a la Serie B en 2019, y aunque lo revirtió al año siguiente, vuelve a descender este año a segunda división.
– Indemnizaciones pendientes –
Las investigaciones determinaron que el avión se quedó sin combustible, con un plan de vuelo con irregularidades, que no preveía una recarga reglamentaria.
Los familiares de las víctimas continúan luchando por justicia en distintos procesos que se llevan adelante en varios países.
La policía brasileña detuvo en septiembre último a la boliviana Celia Monasterio, que se encontraba prófuga y es señalada como responsable de autorizar el plan de vuelo de la compañía LaMia, del país andino.
Antes de su extradición, solicitada por la justicia de Bolivia, Monasterio negó responsabilidades el jueves pasado ante una Comisión Parlamentaria del Senado brasileño que investiga la falta de indemnizaciones.