Julieta Cantos
Julieta Cantos
9:13 (hace 5 horas)
para yo
El pasado viernes 10, me llegó a través de un lector, una convocatoria pública y abierta, realizada por el Concejo Municipal de San Cristóbal para la discusión sobre los predios municipales y la ordenanza de San Cristóbal, ese mismo día.
Lamente mucho haberme enterado tan tarde. Tareas de trabajo establecidas previamente lo hicieron imposible.
Aplaudo la iniciativa, segura de que es un trabajo que requerirá de muchas reuniones públicas y abiertas, para llegar a tomar decisiones serias que involucren a todos los sectores. Quiero conocer cuáles fueron los primeros aportes en esta convocatoria y quiénes participaron. Quiero saber con suficiente antelación cuándo serán las próximas convocatorias para seguir debatiendo puntos como los antes señalados. Propongo que las futuras convocatorias se sectoricen y se realicen como cabildos abiertos en espacios públicos en nuestra ciudad, en donde puedan participar las comunidades, independientemente de que se hagan otras reuniones que incorporen a todos los sectores de la ciudad. Mi correo es julietasinlí[email protected], en la seguridad de que tengo lectores en el Concejo Municipal que me harán llegar la información solicitada, para debatirla a través de esta columna. También pienso que este es un tema importante, muy importante, pero el Señor Alcalde tiene temas urgentes que acometer de manera inmediata. El problema de la basura y el transporte que hemos reseñado insistentemente por esta vía, y qué afecta el desenvolvimiento natural y cotidiano de nuestra ciudad, no ha sido resuelto, ni siquiera ha habido paliativos que disminuyan la presión sobre los ciudadanos. Cómo saben dedico una semana de cada mes a registrar la opinión de mis lectores; en este caso es un lector que me escribió a raíz del artículo de la pasada semana, sobre la basura. Aquí lo despliego:
“Julieta. Buenos días. Excelente su artículo. Por fin, una persona con suficiente criterio técnico, opinó sobre el grave problema de la basura. Pudiera seguirse profundizando sobre el tema porque afecta la salud y la estética de la ciudad, además modifica el paisaje. Parece que hoy miércoles se reunió la gobernadora con un grupo de funcionarios para tratar el asunto del vertedero en El Palmar, Municipio Torbes. Pero la gobernadora y las municipalidades solas no pueden tratar y resolver el problema, sino tienen el apoyo y la ayuda del gobierno nacional. Es un problema de competencias y de financiamiento. En tanto, San Cristóbal está asfixiada y contaminada por la basura. En los conjuntos residenciales hay montañas de basura y ya está contaminada con gusanos, desprende malos olores y atrae a los zamuros. El centro de San Cristóbal es un asco. Con la lluvia, la basura forma un caldo contaminante que se esparce y llega a todas partes.
La parte superior de las cercas de las casas y terrenos, están llenas de bolsas de basura. Hay zonas por donde el servicio de aseo urbano lleva más de un mes sin pasar. Lo peor es que las personas se han acostumbrado a la mugre y a vivir en medio de la basura, la botan a la calle y a las jardineras de las avenidas, sin importar que otros les vean. Es la desesperación de no saber qué hacer con ella y un grave asunto de salud pública, pues pudiera desatarse una epidemia. Debería estudiarse el caso de Cúcuta que ha podido combatir el problema de los desechos. Lo hicieron técnica y profesionalmente. En favor de la gente. El problema político e ideológico tiene que apartarse para poder encontrar una solución, que pasa por acudir a la iniciativa privada. Desde que se agravó el problema de la basura, la gobernación y la mancomunidad solas, lo que han hecho es un saludo a la bandera. Tiene la palabra el gobierno nacional”.
Pienso, que lo más importante de esta exposición de hechos es que la gente está siendo afectada de tal manera que se siente con la capacidad de opinar sobre problemas comunes que afectan su cotidianidad y modo de vida. Los ciudadanos de San Cristóbal piden acciones concretas que modifiquen el estado actual de convivencia, bienestar y felicidad que debe aportar nuestra ciudad. En términos generales, el problema de la recolección y tratamiento de la basura, bajo la situación económica política en que vivimos, es un negocio; por lo tanto, la no resolución del problema de la basura en este momento expresa que hay un proceso de negociación entre las autoridades locales y las empresas, que actúan en modalidad de mafias. Las empresas presionan a las autoridades no actuando, y así buscan el apoyo de la ciudadanía que se siente afectada por la no respuesta. En la medida en que los desechos solamente se conviertan en basura porque no hay un tratamiento previo, se termina dejando en manos de las autoridades y las empresas recolectoras, y cuando hay un conflicto entre ambas, surge la manipulación. Los afectados directos son los ciudadanos. (Julieta Cantos)