“Finalizamos el paro de 72 horas convocado por las federaciones nacionales cumpliéndose en 100% a pesar que el gobierno nacional y las zonas educativas, activaron el aparato perseguidor e inquisidor en contra de los docentes, incluso de los alumnos”.
El balance corresponde al profesor Gerardo Ramírez, de la coalición sindical, quien insistió en que el magisterio respondió positivamente.
“Pero no solo el magisterio, también los padres y representantes dijeron que sí a este llamado a paro, entendiendo que esta acción de protesta por 72 horas no es solamente por el salario de los trabajadores de la educación, sino que también es una protesta por las condiciones en las que hoy se encuentra la infraestructura educativa, por la calidad de los alimentos que en las escasas escuelas a nivel nacional, le ofrecen a los estudiantes” dijo el docente presidente de Fenatev.
Asimismo precisó que además están protestando por la libertad, que no significa caminar y hablar, porque esos son actos naturales, significa tener la posibilidad, en el caso de los trabajadores es tener la capacidad de tener el poder adquisitivo para cubrir las condiciones básicas de alimentación, económicas y culturales, tal como establece el artículo 91 de la Constitución que reza que el estado debe garantizarle a los trabajadores las condiciones mínimas de alimentación a través del salario.
“La canasta básica ya pasó los 6 millones de bolívares, por cierto en estos dos últimos días el dólar subió , la depreciación del bolívar fue prácticamente de un 100% lo que equivale a decir que lo que se aumentó en salario, eso ya se lo tragó el índice inflacionario y avizoramos, que para finales de diciembre, el dólar estará según los entendidos en la materia en 40 mil bolívares, lo que significa que iniciaremos el año 2020 en situación que la iniciada en el 2019”, sostuvo el profesor Gerardo.
Esto significa-apuntó-que la estampida de docentes, se va a incrementar en un 60% y lamentablemente las escuelas se quedarán sin maestros y sin estudiantes.
Refirió que acababa de pasar por la escuela técnica industrial donde conversó con algunos alumnos que estaban en las afueras, porque no encontraron a nadie, escasamente había personal de la parte administrativo y obrero y en la conversación los jóvenes expresaron que en casa salón de clases hay tres o cuatro estudiantes y que el director se dio a la tarea de mandar audios y mensajes a los estudiantes y maestros, exigiendo que se incorporaran y la respuesta fue negativa.
Ahora esperan el balance de las federaciones y la toma de nuevas decisiones, la primera convocar a un paro de 120 horas y luego la hora O.
“Docentes universitarios siguen
recibiendo sueldos miserables”
“Los docentes universitarios, al igual que los profesores de primaria y secundaria, siguen recibiendo sueldos miserables que, en primer lugar, no están ajustados a la realidad, a ese proceso inflacionario que vive el país, y es por ello que también cumplimos el paro de 72 horas”.
El profesor Omar Pérez Díaz, vicerrector Administrativo de la ULA-Táchira, subrayó que en estos momentos hay docentes que se desempeñan como conserjes o vigilantes -no es que se esté desconociendo la trascendencia social que cumple cada individuo, aclaró-; “el profesor universitario entró a ese grupo de vulnerables dadas las limitaciones de presupuesto”.
En tal sentido, aseveró que hay profesores que tienen su carro parado porque no tienen cauchos o por una batería, porque el salario que ganan solo alcanza para sobrevivir.
Ayer, jueves, un cartón de huevos fue exhibido en las vitrinas a un precio de 84 mil bolívares; y la mayonesa y mantequilla también han tenido un importante incremento; entonces, “los sueldos no alcanzan para nada”.
“Toda la atención social, médica, a la que estábamos acostumbrados, y las medicinas que entregaban, desaparecieron, problemas que también se repiten con los empleados y obreros”, dijo el profesor Omar Pérez Díaz.
La situación es sumamente difícil para toda la comunidad universitaria, por eso se cree que el Estado debe revisar esa política equivocada que hasta el momento se ha desarrollado.
Precisó que esta situación desmotiva al estudiante, en virtud de que las providencias estudiantiles pasaron al olvido. Todos los estudiantes eran atendidos, incluso escogían la clínica, y Fames pagaba; la atención médica era de primera; sin embargo, esto pasó a ser solo un recuerdo.
—El comedor estudiantil tiene un año y dos meses que no da atención alimentaria a los estudiantes y eso también desmotiva la permanencia en la universidad— dijo.
Precisó que muchas decisiones se han centralizado, un ejemplo es que ellos mandan las verduras y las carnes, pero no con la debida regularidad, y las empresas y comedores lo que hacen es operar; pero, entonces, no han ajustado los precios a la nueva realidad que vive el país, en cuanto a los procesos de inflación, con decretos presidenciales, situaciones que han hecho que no se pongan de acuerdo para que opere el comedor de la ULA-Táchira.
“Nosotros tuvimos un comedor de calidad, atendía 3.400 personas”, pero ya tiene más de un año que no está operativo.
Al referirse al transporte estudiantil, subrayó que se está prestando solo en una ruta estudiantil, con una unidad que incluso fue arreglada por los mismos estudiantes y está obsoleta por el número de años de servicio.
Recalcó que el transporte estudiantil es uno de los aspectos más socialistas que hay, entendiendo que quien utiliza la ruta es el joven de bajos recursos, que no tiene para pagar un taxi ni el transporte público, que en estos momentos es muy costoso, pero este servicio ya no puede ser ofrecido por las universidades a sus estudiantes.
—Todo esto hace visualizar que hay una posición equivocada en cuanto a la política universitaria por parte del Estado -apuntó el profesor Omar Pérez Díaz-.
Deben entender que el desarrollo de un país está en las universidades, todos los procesos que han impactado socialmente en el mundo se han hecho con investigación y educación.(NP)