(Vía As.com) Nuevo giro de guión en el caso Neymar. El brasileño sigue firme en su idea de abandonar el París Saint-Germain y también sigue firme en considerar al Barcelona como su opción favorita para huir de lo que su círculo íntimo considera que es “una cárcel de oro”. Pero parece que la realidad va por otro lado y Neymar empieza a ver claro que su salida al Barcelona es altamente improbable, así que, según publica en su edición de hoy Mundo Deportivo, el futbolista ha iniciado contactos para ofrecerse al Real Madrid, la Juventus, el Bayern y el Manchester United.

En el entorno del brasileño se han dado cuenta de que las opciones de que cuaje una negociación entre el Barcelona y el PSG son más que remotas. De entrada, la enemistad entre ambas entidades es mas que conocida. Dejando a un lado la rivalidad deportiva, el Barcelona y el PSG ya se enfrentaron en su día por cuestiones de mercado con jugadores de por medio. El PSG frustró una y otra vez los intentos de la entidad blaugrana por hacerse con los servicios de Thiago Silva y Marquinhos (en varias temporadas), así como en los casos de Di María, Verratti y Rabiot, estos dos últimos llegaron a hacer un pulso al club del jeque. Así que el escenario entre ambas partes no parece el más propicio para sentarse a dialogar.

Por otro lado, existe un problema de dinero. El Barcelona, con evidentes tensiones de tesorería tras los fichajes de De Jong (71 millones) y Griezmann (120) busca fórmulas imaginativas para acometer la operación incluyendo en ella jugadores. En AS ya se publicó la oferta de 40 millones más Dembélé y Coutinho, noticia que cambiando a Dembélé por Rakitic confirmaba hoy L’Equipe.

Esta oferta no convence en absoluto al PSG que en el caso de aceptar una oferta por Neymar, sólo querría dinero, mucho dinero. El jeque Al-Khelaifi quiere, por lo menos, recuperar la inversión de 222 millones que hizo en su día en la operación que hizo saltar por los aires las relaciones entre ambos clubes.

Así que ante este panorama, Neymar, que sigue decidido a irse de París, busca otros puertos donde atracar. No lo tendrá fácil. En el Madrid, si bien Florentino Pérez siempre le quiso tiene la oposición de parte de la afición; en el Bayern no son muy dados a excentricidades, aunque necesitan extremos; la Juventus ya tiene a Cristiano Ronaldo como estrella y acaba de fichar a De Ligt y en el United no jugaría la Champions League. El culebrón continúa.