EL MUNDO DEL ciclismo tiembla. LA SOLA posibilidad que el Tour de Francia sea aplazado para el año entrante, traería consigo pérdidas millonarias a todos los niveles. LA AGENCIA Francesa de Prensa, cuyas siglas son AFP, hizo un importante trabajo periodístico el pasado lunes, antes que la prensa deportiva internacional, entre los que destacan los diarios españoles Marca y AS dieran a conocer la noticia a mediados de la tarde de este martes donde da cuenta que el Tour se llevará a cabo del 29 de agosto al 20 de septiembre, en principio estaba programado del 27 de junio al 19 de julio. EL PRESIDENTE de Francia, Emmanuel Macron, anunció el lunes 13 de Abril que no habrá eventos deportivos con público en Francia al menos hasta mediados de julio. LA MÁXIMA autoridad de la gran prueba del pedalismo de ruta a nivel universal había declarado recientemente que la carrera iría contra viento y marea en la fecha que la organización tenía planificado. TODO LO que se diga, incluso después de lo conocido en la tarde de este martes quedará en saco rato en el supuesto que haya recrudicimiento del coronavirus, pandemia que tiene al mundo patas arriba. NI SIQUIERA el más perverso ser humano desearía que el COVID-19 siga cobrando víctimas fatales, que la humanidad siga en cuarentena. PERO ES bueno dar a conocer a través de esta columna algunos extractos del trabajo periodístico hecho por versados en materia deportiva. LO ESCRITO por la AFP sigue vigente, pues nadie puede adivinar que pasará en los próximos meses, menos aún cuando este flagelo va y viene, hay días que las muertes van en ascenso y en otros desciende, especialmente donde su acción ha sido más devastadora, sobre todo en España, Italia y Estados Unidos. EN LA información de la AFP tildan al Tour como el monumento del deporte de Francia y joya de La Corona de la empresa Amaury Sport, es además el pulmón económico del ciclismo profesional. Una eventual cancelación por la pandemia del nuevo coronavirus tendría durísimas consecuencias, según los expertos consultados por la AFP. LA NO realización del magno evento del pedal francés y universal, afecta no solo a millones de telespectadores que durante tres semanas vven el gran pelotón pasando por bellos paisajes franceses y escalando emblemáticas montañas, sino que haría mella en el bolsillo de los equipos, que en la edición 2020 debería ser de 22 combinados, o lo que es igual, 22 formaciones en perfecta fila india el día de la primera etapa. EN EL supuesto que la ya centenaria carrera no pudiera disputarse “se abre la posibilidad a un hundimiento económico del sector”, advierte Jean Francois Mignot, investigador y autor de la “Historia del Tour de Francia”, una obra sobre la “Grande Boucle”.
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EL LUNES decía la nota que, el mantenimiento en las fechas previstas sigue en pie, parece poco probable por la situación actual, merced de continuar Francia confinada y sin ver cerca el final de la pandemia. LAS AMENAZAS no se reducen únicamente a las primas que la empresa Amaury Sport (ASO) paga a los equipos participantes, que en la edición 2019 habían sido de unos 2,3 millones de euros, según la Asociación Sporsora, que agrupa a actores de la economía del deporte. ES TAN importante la competencia francesa, según explica Jean François Mignot, que “para muchos patrocinadores de los equipos, la razón de estar en el ciclismo es el Tour de Francia”. ES CLARO respecto que los patrocinadores aceptan invertir, es para que los espectadores vean su marca en el Maillot de los corredores durante el Tour, pues la única prueba ciclista que es seguida masivamente”, puntualiza. PARA BRUNO Bianzana, director general de la agencia Sport Market, “existen pocas disciplinas que alcancen una especie de punto en un evento, que es además gestionar privadamente y no para un ente federativo”. PRODUCTO DE los ingresos de la televisión y los patrocinadores el Tour se ha convertido en una competencia lucrativa para la empresa ASO a mitad de los años 1980,alcanzando para ese momento la suma de 50 millones de euros. LA ASO también gestiona otras competencias del ciclismo francés como la París-Niza y el Criterium Daphiné, amén de clásicas cómo la París-Poubaix. SEGÚN SPORSORA, la cifra del negocio en 2019 estuvo por el orden de 130 millones de euros, de los cuales entre el 40 al 50 por ciento provenía de los patrocinadores, un 50-55% de loa derechos de televisión y entre el 5-10% de las autoridades se invierten para acoger la salida o llegada de una etapa. Y ANTE este panorama como queda el turismo: En Opinion de los expertos en la materia, no celebrar el Tour este año sería un golpe muy duro para ASO, ente que también organiza otras carreras de importancia. NO CABE duda que el Tour es para esta empresa la gallina de los huevos de oro, el que sostiene las otras grandes pruebas del ciclismo internacional. EN CONCRETO, todo el mundo necesita del Tour y el Tour necesita el resto del calendario. DE CARA a lo que se avecina, en el supuesto negado que el Tour tuviera problemas para la no celebración este año, los patrocinadores perderían mucho por la exposición televisiva y por ínter del evento, pero también en lo que tiene que ver con la ya conocida caravana, una auténtica feria publicitaria, un total de 31 marcas e instituciones en 2019 que pasa después del pelotón, que en la carretera, durante el recorrido el evento se reúnen entre 10 y 12 millones de espectadores, donde el turismo también tiene su coletazo. POR EL momento y de acuerdo a lo conocido en la tarde de este martes, el Tour 2020 se disputaría del 29 de agosto al 20 de septiembre.
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EN VENEZUELA Y de acuerdo al calendario 2020 dado a conocer por la Federación Venezolana de Ciclismo, buena parte de las pocas carreras que existen en el país, incluyendo el Giro Nacional, corren el riesgo que no se cumplan o celebren. CLARO UNA cosa es el ciclismo en la patria de Bolívar y otra en Europa, una diferencia abismal que no tiene comparación. WILLIAN Rodríguez, presidente de la Asociación Tachirense de Ciclismo, organizador de la Vuelta al Táchira en Bicicleta es optimista, cree que en los ocho meses que restan para el mes de enero, hay tiempo cambiar muchas cosas, especialmente lo que tiene que ver con la comercialización del evento. PERO HA sido precisamente la parte comercial el gran talón de Asociclis mo desde su fundación en 1966. HAN PASADO gobiernos adecos y copeyanos, primero, y de 1998 hasta nuestros días los gobiernos socialista de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, sin que el Giro Andino se haya podido autofinanciar, como ocurre con las principales carreras por etapas en el mundo.
Homero Duarte Corona