El torero venezolano Jesús Enrique Colombo volvió a demostrar por qué es uno de los nombres más sólidos del toreo latinoamericano, al convertirse en el máximo triunfador de la corrida mixta celebrada este martes en la plaza “Jorge Gutiérrez” de Tlahuelilpan, Hidalgo. Con una actuación de temple, técnica y entrega, Colombo cortó tres orejas y salió a hombros ante una afición entregada.

El festejo, celebrado en el marco de la feria local, registró tres cuartos de entrada en una tarde de clima agradable. Se lidiaron un novillo de Bernaldo de Quirós y seis toros de Coyotepec, de presencia seria y comportamiento desigual, entre los que destacó el tercero, premiado con arrastre lento.

Colombo cuajó una faena de altos vuelos al primero de su lote, al que entendió desde el capote y llevó con suavidad en la muleta, logrando pasajes de gran profundidad. La estocada fue efectiva y el juez concedió dos orejas. En su segundo, más exigente, el venezolano mostró firmeza y oficio, extrayendo muletazos de mérito que le valieron una oreja más.

El colombiano Manolo Castañeda también salió a hombros tras cortar dos orejas al segundo de su lote, mientras que el novillero El Bicharraco saludó una ovación y Antonio García “El Chihuahua” fue ovacionado en ambos turnos.

La actuación de Colombo confirma su proyección internacional y su capacidad para conectar con públicos diversos. Su paso por Tlahuelilpan no solo dejó huella en la arena, sino también en el corazón de la afición mexicana, que lo despidió entre vítores y pañuelos blancos. Una tarde de toros que reafirma el vigor del toreo latinoamericano y el talento emergente que cruza fronteras. Carlos Alexis Rivera