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La humildad y don de gente, artífices del éxito de Giovanni Savarese

15 de agosto de 2020

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En condición de jugador fue un artillero nato en clubes donde actuó y en la selección nacional. En su corta carrera de director técnico, sumó su primer lauro el pasado martes, luego de titular campeón al Portland Timbers, en una edición única de la MLS is Back, después de superar por 2-1 a su similar del Orlando City

Por Homero Duarte Corona

Los éxitos deportivos de venezolanos en el exterior, en el caso específico lo que tiene que con el fútbol, disciplina que poco a poco ha ido escalando peldaños a nivel de selecciones y en el plano individual a través de jugadores que se abren paso en clubes aquilatados de América y Europa, son motivo de satisfacción para quienes de una u otra forma les siguen la huella a los nativos, allende las fronteras patrias.

Foto/Tomada de Balonazos- El joven entrenador junto a un grupo de jugadores de su divisa.

En el pasado, hace 30 años o un poquito más, era utópico pensar en la exportación de jugadores venezolanos, y muchos menos en directores técnicos o entrenadores, sabedores en el mundo que el deporte rey en Venezuela, desde hace muchos años, es el béisbol; el fútbol estaba relegado a un segundo plano o un poco más abajo, superado por el baloncesto y el ciclismo, tanto a nivel deportivo como de aficionados.

Poco ha ido “floreciendo” el balompié rentado nacional en el contexto internacional; el jugador criollo, sin deslumbrar como lo han hecho desde siempre argentinos, brasileños y uruguayos, con mayor énfasis los “albicelestes”, ha puesto en alto el gentilicio, el nombre de Venezuela, ya cuentan a la hora que dirigentes de clubes de los dos grandes colosos de América, Brasil y Argentina deciden conformar los equipos.

Pero no solo en el continente americano el jugador venezolano tiene un lugar ya reconocido, también en Europa y otras latitudes, para corroborar que hace rato ya el fútbol venezolano dejó de ser la “cenicienta”, como se le tildaba en el pasado.

Los jugadores prácticamente les abrieron las puertas a sus compatriotas en lo que a directores técnicos se refiere; claro que los propios entrenadores criollos mostraron su calidad y capacidad con el buen trabajo en las selecciones nacionales, con Richard Páez Monzón como abanderado, después de lo hecho con sus jugadores cuando tomó la Vinotinto de mayores en 2001. Le siguieron César Farías, Noel Sanvicente, que tuvo un paso muy efímero, y Rafael Dudamel, quien logró un subtítulo mundial con la Vinotinto Sub-20 en Corea del Sur en 2017.

Lo hecho con la Vinotinto les sirvió de plataforma de lanzamiento para dirigir a nivel de clubes de Sudamérica. Primero fue Páez, quien mostró su “chapa”, fue llevado al legendario Millonarios de Bogotá, consiguiendo el título de la Copa Colombia, premio que hacía varios años no lograba el “Ballet Azul” de la capital neogranadina.

El cumanés César Farías no se quedó atrás, también ha enseñado sus buenos oficios en lo que a clubes sudamericanos se refiere, y ahora mismo está al frente de la selección de mayores de Bolivia, con la asesoría de paisanos suyos, uno de ellos el tachirense Pedro Depablos.

Francesco Stífano, joven entrenador nacido en Caracas, exitoso en algunos equipos venezolanos, sobresaliendo el Zamora FC con el que obtuvo dos títulos, en la actualidad dirige al club Águilas Doradas de la Primera División de Colombia, respaldado por lo hecho en la Copa Sudamericana de 2019, que llevó al Zulia FC hasta cuartos de final.

Giovanni Savarese triunfa en la MLS de Estados Unidos

La humildad y el don de gente de este joven caraqueño de 49 años, primero como jugador y ahora en función de director técnico, la clave para su éxito, siempre destacando y dejando en claro su honestidad dentro y fuera de la cancha.

En Venezuela debutó con el ahora desaparecido Deportivo Italia en 1989, allí estuvo tres años; dio un salto a la MLS de Estados Unidos, para jugar hasta 1998; regresó a su país para militar con el Caracas FC por apenas una temporada y volver al gran país del Norte en 1999; en el 2000 estuvo en el Peruggia de Italia y el Viterbese por una campaña. Volvió a USA en 2000 y jugó por cuatro años.

Ya retirado como jugador, Savarese se inclinó por la carrera de director técnico, debutó en el banquillo en 2013, en el club Cosmos de New York, divisa en la que cerró su ciclo de jugador nada menos que el mítico Edson Arantes do Nascimento, conocido mundialmente como el Rey Pelé.

Por cuatro años estuvo en el Cosmos, adquiriendo experiencia, pero por encima de todo poniendo de manifiesto su seriedad, profesionalismo y don de gente. Del equipo neoyorquino saltó al Portland Timberts de Miami en 2018, para luego de dos años titularlo campeón en una edición única, específicamente la “MLS is Back”, luego de vencer el pasado martes, en un solo compromiso de la final al Orlando City por 2-1, celebrado en el Complejo Deportivo Disney en Orlando, Estados Unidos.

La página Balonazos.com extrajo algunas de sus declaraciones que le dio al departamento de prensa de su equipo minutos después de concluido el partido que le dio el título: “Hay un gran sentimiento por lograr esto en este torneo. Un momento histórico para nuestro club. Crédito a los jugadores porque vinieron aquí con un propósito. Desde el momento en que llegamos aquí desde Portland, la mentalidad fue asegurarnos de que ganáramos un juego a la vez y todos demostraron, juego por juego, que la unidad que tenemos, la madurez que mostraron, la forma en que se fueron en cada juego, conseguir esto ha sido un gran logro».

Por su trayectoria, primero como jugador, goleador nato en los equipos donde militó, al igual que en la selección nacional cada vez que los convocaron. Y ya como entrenador, dejando constancia de sus conocimientos, no cabe la menor duda que está escalando peldaños para llegar a la dirección técnica de la Vinotinto de mayores,

No ha expresado esta intención de sentarse en el banquillo de la selección de su país, pero qué jugador o seleccionador no sueña con defender los colores patrios en cualquiera de estas instancias, y sin lugar a duda que Savarese ya ha hecho méritos para dirigir el combinado criollo.