Madrid, dic (EFE).- El Real Madrid, con el ánimo recuperado tras las victorias frente al Girona y Atalanta, afronta en Vallecas un derbi siempre especial para el Rayo, que tratará de dar la sorpresa ante un rival de mucha pegada pero en el que no estará el francés Kylian MBappé, lesionado.

El Real Madrid llega a Vallecas con la moral subida tras una victoria de entidad en Bérgamo el pasado martes. Un partido clave en el devenir del conjunto blanco en la Liga de Campeones que selló con un 2-3 frente a la Atalanta -hasta dicho encuentro, quinta clasificada en la competición europea y segunda en la doméstica-, en el que la única mala noticia fue la lesión de Kylian Mbappé.

El galo, que parecía dejar atrás las dudas tras dos penaltis fallados, ante Liverpool y Athletic Club, en dos derrotas del Real Madrid, marcó en el minuto diez su segundo tanto en dos partidos pero tuvo que abandonar el terreno de juego en el 36 por una lesión en el muslo de la pierna izquierda.

Mbappé no estará en Vallecas y se espera que viaje a la Intercontinental del próximo miércoles, en la que el Real Madrid podría ganar su segundo título de la temporada, tras la Supercopa de Europa.

Eso sí, antes tiene una visita “exigente”, como calificó Carlo Ancelotti al estadio de Vallecas, en el que empató la pasada temporada y perdió la anterior y del que sacar un buen resultado es clave para que el conjunto blanco siga dependiendo de sí mismo para ser el líder de la Liga, ya que está a dos puntos del Barcelona con un partido menos.

Frente al Rayo, “Carletto” recupera a Eduardo Camavinga, otra opción más en un centro del campo al que apunta a volver Aurelien Tchouaméni, al que su técnico elogió por su “altruismo” al jugar de central, a la vez que le catalogó como “un pivote defensivo como pocos hay en el mercado”. La vuelta a su posición natural supondría el retorno al centro de la zaga del canterano Raúl Asencio como acompañante de Antonio Rüdiger, con Lucas Vázquez y Fran García, únicos laterales sanos de la primera plantilla, en los costados.

En el centro del campo apunta a volver a ser titular Luka Modric tras disputar solo siete minutos ante la Atalanta, lo que relegaría a Dani Ceballos al banquillo, ya que Fede Valverde y Jude Bellingham -en racha tras marcar en seis de los últimos siete encuentros- parten como indiscutibles.

En la delantera, Vinicius Junior será titular por segundo partido consecutivo tras la lesión muscular que le hizo perderse los cuatro anteriores, y el hueco de Mbappé será para Rodrygo Goes.

Enfrente está el Rayo, que afronta el derbi tras quitarse un peso de encima ganando al Valencia en Mestalla la pasada jornada y frenar una mala racha de tres derrotas consecutivas en Liga.

El conjunto vallecano, a seis puntos del descenso, no renuncia a dar la sorpresa y volver a ganar al Real Madrid, como hizo por última vez el 7 de noviembre de 2022, cuando se impuso 3-2, o empatar, cómo consiguió el pasado 18 de febrero de este 2024, cuando sacó un punto (1-1) en lo que fue el debut de Iñigo Pérez en el banquillo franjirrojo.

El técnico franjirrojo, que sigue sin poder contar con Raúl de Tomás, tendrá que decidir por quién apuesta para la delantera, si por el franco-angoleño Randy Nteka o por Sergio Camello. EFE