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Deportes
Táchira-Caracas, casi segura final soñada en el estadio Pueblo Nuevo
9 de noviembre de 2023
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El domingo termina el cuadrangular del G-4, al Caracas le basta un empate ante Deportivo Táchira para clasificar a la final, mientras que el “Penta” Portuguesa, está obligado a ganar por más de dos goles a Puerto Cabello y ligar por un triunfo de más de un gol del aurinegro frente al rojo para ser finalista
Homero Duarte Corona
Jugada la penúltima fecha de la final del cuadrangular del G4, solo el Deportivo Táchira ya tiene el boleto para ir en pos del título y por ende optar por la conquista de la Décima Estrella.
El empate frente a Portuguesa FC, 1-1 le bastó para alcanzar el cometido, llegar a 11 puntos en 5 compromisos, de los cuales ganó 3 y empató 2, aunado a ello mantuvo un invicto de 27 fechas, batiendo varios récords en el acontecer del balompié rentado nacional.
En el otro partido, el Caracas FC dio cuenta de Academia Puerto Cabello por la mínima diferencia, para eliminar al huésped de la “Bombonerita” bajo la dirección técnica de Noel Sanvicente, e ir este domingo en busca del otro cupo finalista en crucial partido a celebrarse en el estadio Pueblo Nuevo a partir de las 5 de la tarde frente al Deportivo Táchira.
Temporada de ensueño del aurinegro
Lo hecho por el equipo de las nueve estrellas, sencillamente es digno de elogio, apenas perdió dos partidos en la primera vuelta de la ronda eliminatoria, ambos de visitante, en la segunda y sexta fechas, con resultados negativos de 3-1 ante Hermanos Colmenares FC y por 2-0 en la capital del país contra el aún campeón Metropolitanos FC.
A partir de entonces el Deportivo Táchira no sabe lo que es perder, solo empates y triunfos, para una seguidilla de 27 partidos invicto: 8 de la primera vuelta, 14 de la segunda y 5 del cuadrangular del G4, que espera mantener esta dictadura en el choque de cierre del domingo y el juego de la gran final.
La empatía, el buen manejo del grupo, aunado a otra serie de factores, donde también juega papel preponderante la parte económica, ha sido la clave para que ahora la afición haya vuelto al estadio y el equipo sea el mismo Deportivo Táchira grande de siempre, mandón dentro y fuera de su fortín.
Eduardo Sarago lo dijo en más de una ocasión cuando llegó como relevo del director técnico catalán Alexandre Pallarés: “yo no puedo responder por un grupo humano que no armé; cuando tenga bajo mi mando los jugadores que contrate, entonces si asumo mi total responsabilidad”.
Y estaba en lo cierto el buen técnico nacional, él mismo buscó sus jugadores y armó el equipo, y los resultados están a la vista de todo el mundo, en el umbral de titularse campeón y la conquista de la décima estrella, tarea que no será nada, pues sencillamente se pudiera dar por descontado que sea el Caracas FC, su eterno verdugo de toda la vida.
En el deporte no hay nada escrito, cualquier cosa puede suceder, pero todos los caminos apuntan a que están dadas las condiciones para que el Deportivo Táchira se corone campeón el sábado 25 de noviembre en el estadio Pueblo Nuevo, lo que debe ser un lleno hasta la bandera, para utilizar un término taurino, y por consiguiente una fiesta sin parangón en los anales del fútbol rentado venezolano.
Hace dos años, en el estadio Olímpico de la capital del país, el Deportivo Táchira, frente al Caracas FC, se coronó campeón en el castigo de las penas máximas y obtuvo la novena estrella, con la dirección técnica del tachirense Juan Domingo Tolisano.
Se repetirá la historia…? Volverán a encontrarse aurinegros y Rojos del Ávila, pero ahora en el “Templo” del fútbol nacional…? Todo dependerá de lo que ocurra este domingo en el cierre del cuadrangular final del G4, la doble tanda definitiva en la “Bombonerita” y el “Templo” a partir de las 5 de la tarde.
La afición le “gustaría” que fuera el Caracas FC el enemigo de Táchira en la final, por aquello de la rivalidad, pero para nadie es un secreto que el doce veces campeón nacional, siempre bajo la batuta de Noel Sanvicente ha sido la piedra en el zapato del aurinegro, una especie de embrujo, incluso con otros entrenadores, en esta ocasión con Leonardo González en el baquillo y su asistente Pedro Vera.
En las tres ocasiones que se han enfrentado este año, dos en la ronda eliminatoria y una en el cuadrangular, los compromisos han terminado en empates, que deja al descubierto lo parejos que son los partidos entre los equipos más laureados del fútbol rentado venezolano.
También se vislumbra en el camino una hipotética final de Deportivo Táchira y Portuguesa, que pese a la superioridad del aurinegro, al observar y estudiar hombre a hombre de los dos equipos, la tarea de Saragó y el grupo humano que dirige no sería tan “complicada” en el supuesto que se diera este choque entre aurinegros y rojinegros de Acarigua-Araure.
Todos los partidos son distintos, y aquí está en juego una final a un solo compromiso y cualquier cosa puede pasar, jamás se puede menospreciar a un rival, con ejemplos a lo largo de la historia, que en ocasiones parecía imposible que se dieran.
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