Sant Joan Despí (Barcelona), abr (EFE).- El entrenador del Barcelona, Xavi Hernández, aseguró que la decisión de dar marcha atrás a la decisión de dejar el banquillo azulgrana a finales de la presente temporada se debe a que, en enero, cuando lo anunció, consideraba que el club necesitaba un cambio y ahora siente todo lo contrario.
En una comparecencia celebrada en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva Joan Gamper, con 76 medios de comunicación acreditados, la cúpula deportiva del club al completo, directivos y los dos ayudantes de Xavi, el técnico egarense y el máximo mandatario azulgrana desgranaron los motivos del cambio de rumbo.
Ambos protagonistas tenían que despejar muchas incógnitas en la comparecencia. La más relevante, quizá, explicar los motivos por los que finalmente el preparador catalán ha decidido cumplir su contrato hasta junio de 2025, algo que el pasado 27 de enero, tras una dura derrota contra el Villarreal (3-5), parecía una quimera, pues Xavi aseguró que ni ganando la ‘Champions’ continuaría como inquilino del banquillo azulgrana.
«Rectificar es de sabios», repitió en varias ocasiones a lo largo de la comparecencia el entrenador azulgrana, quien reconoció que la dimisión en diferido de finales de enero quizá fue una decisión «equivocada» porque ahora siente todo lo contrario y cree que el proyecto «no ha terminado».
Y es que el técnico azulgrana se ve «con fuerzas», a pesar de que está convencido de que el entorno «va a seguir siendo cruel, desagradable en las situaciones adversas» que el equipo deberá sortear en el futuro.
«Lo más importante es pensar en la entidad. Cuando nos reunimos con el presidente, puse mi cargo a su disposición, pero entonces me encontré con una gran confianza del presidente, el área deportiva y toda la junta», argumentó.
Xavi aseguró que también ha sido muy importante el apoyo de su equipo técnico, así como «la complicidad de los jugadores», que le han hecho ver que «este proyecto tiene que continuar».
Con todo, el técnico afirmó que la decisión de continuar es irrevocable, independientemente de cómo acabe la temporada: «Tengo un compromiso intacto, no volverá a suceder lo que pasó en enero».
El técnico, que en la sala de prensa estuvo acompañado por sus dos ayudantes, Sergio Alegre y su hermano Óscar, negó las informaciones que, a lo largo del miércoles, apuntaban a que su continuidad estaba condicionada a una serie de cambios en el cuerpo técnico. «No habrá ningún retoque en el staff», afirmó.
No obstante, Laporta apuntó en su discurso que «tanto la dirección deportiva como el entrenador trabajarán para ir mejorando lo que se tenga que mejorar».
«Pensamos que esta temporada, a pesar de no haber conseguido los objetivos, sí hay cosas positivas. Veo que el proyecto está intacto en cuanto a confianza e ilusión. Se producirán unos ajustes, pero no voy a dar el gusto a los que quieren reventarlo todo por no haber conseguido los objetivos esta temporada», añadió.
El presidente se mostró especialmente «contento» por la continuidad del técnico catalán -«siempre he querido que continuara», puntualizó- y desveló que no existieron discrepancias sobre la decisión con sus compañeros de junta directiva, con los que se reunió el mismo miércoles antes de verse con Xavi.
«En la reunión de la junta no votamos sobre la continuidad de Xavi porque estaba pendiente de reunirme con él. Expuse la situación. Ayer se precipitó, me llamó Deco que estaba con Xavi y nos reunimos. Cuando vimos claro que Xavi quería continuar, llamé a todos los directivos, todos ellos me felicitaron y me dieron ánimos porque es la mejor decisión. Por unanimidad estábamos todos satisfechos con esta decisión», apuntó.
Laporta, que en un momento de la rueda de prensa se emocionó, dijo que el acuerdo con Xavi en la reunión celebrada en su casa se solventó rápidamente. EFE