Por primera vez, desde 1965, se celebrará a san Sebastián, hoy 20 de enero, sin la parafernalia de años atrás, luego de haber sido nombrado patrono de la feria que lleva su nombre y que daba inicio a los festejos que hicieron del Táchira un lugar de referencia a nivel internacional.

Debido a la pandemia que sufrimos, no habrá sesión solemne de la Cámara Municipal, ni lectura del primer bando de Feria, saludo a propios y visitantes, la apertura de la Fiesta Brava en la Plaza Monumental de Pueblo Nuevo, así como tampoco se cumplió con la afamada Serenata al Patrono, que reunía a distinguidos artistas en el atrio de la Catedral de la ciudad.

Ante las actuales circunstancias de peligro sanitario, se ha acordado solo celebrar una misa pontifical en su honor de manera virtual, a través de las redes sociales, para mantener la fe en el soldado que fuera inmolado por su apoyo a los católicos.

En efecto, él fue el héroe, como militar, para muchos cristianos durante el mandato del emperador Diocesano, quien lo había nombrado jefe de su cohorte de la guardia pretoriana imperial y que como tal, igualmente auxilió a los perseguidos cristianos, por lo que fue condenado a morir asaeteado en plena plaza pública.

De esta sentencia, en donde una lluvia de flechas atravesaron su cuerpo, fue rescatado, por lo que siguió en su peregrinaje de apoyo a los seguidores de Jesús que estaban encarcelados, por lo que nuevamente se ordenó su ejecución, en el 828 después de Cristo, a golpes de azote.

San Sebastián, quien fuera llamado “El Apolo cristiano”, nació en la localidad de Narbona, Galia, del imperio romano y que ahora pertenece a Francia, en el 256 después de Cristo, y en la actualidad es venerado por las iglesias Católica y Ortodoxa, y recordado en numerosos países de América Latina, entre los que se encuentra Venezuela, pues la feria internacional en el Táchira lleva su nombre.

Víctor Matos