Frontera

Canal humanitario, trochas y río: trilogía para cruzar a Colombia

2 de julio de 2021

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Jonathan Maldonado


El escenario de frontera se centra en el ir y venir de Colombia. Los casos médicos, con algunas restricciones, usan el canal humanitario. El resto lo hace por los caminos verdes, mejor conocidos como trochas.

Hoy se cumple un mes desde que el vecino país decidió abrir su frontera con su vecino. Venezuela; entretanto, mantiene el cierre de los pasos por considerar que fue una apertura unilateral, sin consenso. Lo único que mantiene activo es el paso preferencial.

Francis Ayala cruzó este jueves el paso preferencial, como acompañante de su padre, quien iba a una cita médica por sufrir de la tensión. “Fue rápido, ya no hay casi gente”, precisó la dama.

Ayala, cuando no va por motivos médicos, suele usar las trochas, caminos que considera como los nuevos puentes no formales. “Ya se ha vuelto habitual, normal”, remarcó.

Para la dama, es mucho más rápido emplear los caminos verdes que el puente, ya que en esos puntos no suelen presentarse colas, “solo cuando llueve y crece el río”, dijo.

A Marcelo Acuña, de 82 años, los problemas con su tensión lo empujan ir a Colombia. Además de cumplir con su cita médica, piensa aplicarse la primera dosis contra la covid-19. “No había podido cruzar para ponérmela”, recalcó.

Del trayecto por el puente, lamenta que las principales dilaciones y molestias se den del lado venezolano. “Vivo allá, pero hay que reconocer que en Colombia casi nunca dicen nada, solo lo necesario”, agregó.

En este sentido, conminó a las autoridades a hacer más amplio el paso, que no sea solo para ciertos pacientes. “En las trochas no hay ningún control, no se aplica ninguna medida de bioseguridad”, señaló.

“Pagué 60 mil pesos para llegar a la frontera”

Es jueves radical y Amelia Santiaesteban, de 58 años, requería viajar de San Cristóbal, donde vive, a San Antonio del Táchira, para cumplir con su cita de traumatología en la nación vecina.

“Le pagué 60 mil pesos al carro pirata para poder llegar a San Antonio. El conductor se encargó de ´arreglar´ en cada una de las alcabalas donde nos pararon», aseveró la dama, para luego indicar que no le quedaba otra opción, por ser semana radical.

Santiaesteban conminó a las autoridades a ser más flexibles y a evitar los retrasos en los puntos de control, pues «las trochas siguen activas y allí no hay quien vele por la salud».

Tres puntos de control

Alexánder Pereira, de 44 años, cruzó a Colombia para sacarle una cita médica a su progenitora y retirarle los medicamentos. «Hoy (jueves) se registraron pocas colas», aseguró.

Antes de llegar a la mitad del puente, Pereira pasó por tres puntos: en el primero, los funcionarios venezolanos le pidieron los papeles; luego, en el segundo punto, conformado por un equipo médico, le revisaron los récipes, y es donde determinan si puede o no seguir.

«Ya el tercer puesto es el de Migración Venezuela. Allí lo anotan a uno», apuntó quien suele hacer uso del canal cuando acompaña a su madre o cuando le va a sacar una cita, como el caso que hoy lo movilizaba a la nación neogranadina.

«Hoy el paso

estuvo bien»

Albeiro Sánchez, de 77 años, iba a Colombia, con su hija, para hacerse un ecocardiograma. «Hoy el paso estuvo bien, fluido, no se presentó ningún inconveniente», agregó en el instante en que terminaba de cruzar el puente.

«Lo que sí debería es abrirse por completo la frontera. Sabemos que el covid-19 continúa, pero igual la gente está pasando por las trochas. El puente es más seguro», resaltó.

Entretanto, Yoreima Leal, de 53 años, se movilizaba por el tramo binacional para aplicarse la segunda dosis en Villa del Rosario, Colombia. «Mostré el cartón y listo, me dejaron pasar», contó.

«Hoy todo estuvo tranquilo», prosiguió quien se vio obligada a cruzar por las trochas para aplicarse la primera dosis. «Ahí no me dejaron pasar por el puente», lamentó.

Trochas

Este jueves, las trochas abrieron desde tempranas horas de la mañana y su paso estuvo constante, a diferencia del miércoles, cuando registró intermitencia a causa de la repentina crecida del río Táchira.

En semana radical o flexible, los caminos verdes se ven casi igual. Decenas de personas buscan cruzarlos frente a unos puentes binacionales que siguen cerrados del lado venezolano.

A partir de este viernes entran en vigencia las medidas anunciadas por el diputado Freddy Bernal para combatir el incremento de los casos covid-19 en el Táchira.

Jonathan Maldonado

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